Permítanme disentir, no es Bolívar la inspiración de este proyecto de gobierno, es Atila.
Bolívar tenía sueños libertarios y dedicó su vida y fortuna a alcanzar esos sueños, con su ejército libertó 5 países de la América, al final la historia lo recuerda con el título de “El Libertador”, jamás luchó por un pueblo a cambio de bienes de fortuna, ni para perpetuarse a su mando, en su lecho de muerte, en su última proclama manifestó: “mis últimos votos son por la felicidad de la patria. Si mi muerte contribuye para que cesen los partidos y se consolide la Unión, yo bajaré tranquilo al sepulcro”, que grandeza la de este hombre que parió la patria. En cambio Atila, un guerrero formidable, decían, que por donde pisaba su caballo jamás crecía la hierba de nuevo, junto a los “hunos” ( su ejército) dejaron una estela de muerte y desolación, tierras arrasadas, miseria, en fin una especie de plaga para la humanidad.
Los enchufados tuvieron la oportunidad de llegar al poder y así lo hicieron, han tenido la oportunidad de reivindicar la filosofía y pensamiento político que defienden y que fracasó en cada país que fue intentado, sin embargo sus logros son nulos. Hoy somos menos libres e independientes, libertades amenazadas, justicia en entredicho con leyes de plastilina, por ello los enchufados hoy tienen mas similitudes al comportamiento de los Hunos, que al mostrado por los ejércitos del Libertador. Olvidense de la retorica y de los cuentos, este gobierno ha sido el principal obstáculo para el desarrollo del país, son los irresponsables que han impedido el progreso y seguridad social de su pueblo; sus peleas constantes contra el sector productivo, la política de controles y de expropiaciones, desarrolló en el país un apetito insaciable por importar los bienes y productos que pudieran haberse producido a lo interno y consumen los dólares que produce el petróleo, pero es que estos tipos lo que saben es pelear, en materia de gobierno es poco lo que pueden enseñar.
Me parece un ejercicio necio preguntar ¿Que ha hecho el gobierno con los más importantes ingresos de toda su historia?, no han logrado construir las carreteras o autopistas, que construyeron gobiernos en el pasado con muchos menos recursos de los que los enchufados han dilapidado; sus negocios internacionales han terminado por reducir a la minima expresión la industria interna, para ejemplo veamos las empresas básicas de Guayana, que fueron la gran esperanza y ejemplo para aprovechar nuestras riquezas y diversificar la oferta de nuestros productos de exportación, hoy se encuentran arrasadas, y los escándalos por corrupción y conflictos sindicales, apenas empiezan a evidenciar su profundo deterioro, y es que la corrupción, es una de esas plagas que azotan a los pueblos. Esta justicia revolucionaria no castigará jamas los delitos por las pérdidas de toneladas de alimentos del affaire conocido como “Pudreval”, ratificado por el mas reciente indice de Transparencia Internacional sitúa a Venezuela como el país mas corrupto del continente y nos ubica empatados con Haití como décimo país más corrupto del mundo entero, los enchufados, responsables de este flagelo le están robando las oportunidades de desarrollo al país, y ahora pretenden meternos a todos en un saco, y darnos lecciones de moral.
La sesión de la Asamblea Nacional, donde se acordó allanar la inmunidad parlamentaria del Diputado Richard Mardo, fue un circo, donde menos de 100 diputados enchufados (recordemos que son mayoría, a pesar de haber obtenido 49% contra 51% de los votos del momento), callaron la voz que representa a unos 150.000 venezolanos que votaron por el, una especie de juicio sumario, con pruebas tachadas de falsas por el aludido. ¿Qué podíamos esperar?, el que puede lo más, puede lo menos, estos cínicos llegaron a aprobar leyes orgánicas que requieren mayoría calificada, imponiendo su mayoría simple; según Capriles se robaron las elecciones, nos tratan de imponer un pensamiento político al que eufemísticamente llaman “socialismo” no contemplado en la Constitución Nacional, ¿entonces? ¿cuál es la sorpresa?.
No pretendo fastidiar a mis lectores, con un planteamiento que he venido repitiendo varias veces, decidámonos a convocar una Asamblea Nacional Constituyente, para salir de todos los que se tengan que ir; una Constituyente para redefinir el modelo de país y de gobierno que tendremos los venezolanos; la Constituyente para reescribir claramente las leyes que han de regular al estado y los ciudadanos; una Constituyente para terminar de nombrar Contralor General, rectores del CNE, magistrados del TSJ. Esta es una propuesta que incluye a todos por igual, si el país quiere “socialismo” o fidelísimo, que lo plasme en su Carta Magna, que si decidimos ser independientes y soberanos, o adherirnos como colonia Cubana, que se abra la discusión y el pueblo decida, así no hay excusas, todos debemos acogernos al designio definitivo del árbitro superior: la soberanía popular. No corramos la arruga con la excusa de las elecciones del 8 de diciembre, nos toca “caminar y mascar chicles” mientras unos buscan los votos para alcaldías y concejalías, otros impulsamos la Constituyente.