Una serpiente de la especie anaconda, con una longitud 5,8 metros y un peso de 74 kilogramos, fue rescatada en la Represa de Santa María de Caparo, municipio Padre Noguera (Mérida).
El animal presentaba síntomas de deshidratación y tras su estabilización será liberada en un reservorio del estado Apure.
Así lo dio a conocer el director estadal del Ministerio del Poder Popular para el Ambiente, Omar Gutiérrez, quien explicó que la anaconda fue capturada en el embalse compensador para el almacenamiento de las aguas turbinadas del Proyecto Hidroeléctrico Fabricio Ojeda.
Dijo que tras 8 horas de travesía para llegar al lugar, los funcionarios de la coordinación de Conservación Ambiental iniciaron el rescate de la víbora, ya que se encontraba en cautiverio desde el fin de semana.
Su hogar temporal será el Hato “El Cedral”, en el municipio Muñoz del estado Apure, el cual es administrado por la Corporación Venezolana de Alimentos, y es considerado uno de los más importantes reservorios de fauna silvestre y reconocido a escala mundial.
Indicó Gutiérrez que este traslado constituye el primero que se realiza de manera oficial, cuyo objetivo buscaba resguardar la integridad de la anaconda, con miras a llevarla hasta un lugar que le permitiera desenvolverse en su ambiente natural para su posterior liberación en el Río Matiyure.
Explicó que esta especie de agua, considerada la serpiente más grande del mundo, es endémica de Suramérica, es decir solo se encuentra en esta región del mundo. Habita por lo regular en zonas llanas, pero últimamente se ha venido produciendo un proceso de desplazamiento hacia la montaña, producto del calentamiento global, y con este hallazgo no se descarta la posibilidad de reproducción en la zona, ya que cada una de ellas puede tener hasta 40 huevos.
Fuente: Últimas Noticias
Periodista: Rolando Hurtado