Las fotografías publicadas en la cuenta de Facebook de Mandy Trecantin revelan la relación familiar que los hermanos Connor y Noah Barth mantenían con los reptiles, y más en concreto con la serpiente pitón que acabó con su vida, publica abc.es.
En las imágenes, desveladas este miércoles por el diario Daily Mail se ve cómo días antes los pequeños jugaban limpiando los terrarios donde se alojaban los reptiles propiedad de la familia. Se puede ver también cómo los pequeños juegan en una jaula de cristal más pequeña, donde se alojan este tipo de animales.
La policía de Canadá ordenó el sacrificio de la pitón, que tras escaparse de su cubículo estranguló a los niños. A continuación, los restos de la serpiente, de una especie prohibida en el país, fueron trasladados a un zoológico local, donde expertos herpetólogos llevarán a cabo una autopsia.
Jean-Claude Savoie tenía un gran número de reptiles de gran tamaño alojadas en habitáculos con paredes de cristal, como se puede apreciar en las fotos, y que formaban parte de la selección de animales disponibles en su tienda de mascotas, que también funcionaba cono museo del reptil. Entre las especies se encontraba la pitón que acabó con la vida de los pequeños, una gran anaconda y varios cocodrilos.
Los dos niños de cinco y siete años fallecieron estrangulados por la serpiente pitón que se había escapado de la tienda de mascotas y colado en la vivienda familiar de la localidad canadiense de Campbellton, según los datos facilitados por la Policía Montada.
La portavoz policial, Julie Rogers-Marsh, explicó a los medios de comunicación que el animal se escapó de su jaula durante la noche y accedió a través del sistema de ventilación a la vivienda situada en el piso superior, adonde los niños habían acudido a visitar a un amigo. A falta de lo que determinen las autopsias «se cree que los dos niños murieron estrangulados por la serpiente».