El Ministro de Hacienda de Brasil, Guido Mantega, recomendó el lunes a los inversores que eviten hacer grandes apuestas contra el real, diciendo que podrían perder dinero si la divisa se recupera de su reciente debilidad.
Mantega dijo que el mercado de divisas internacionales ha estado bajo mucha tensión debido al aumento del rendimiento de los bonos del Tesoro de Estados Unidos, pero dijo que la situación en Brasil está “bajo control”, con dólares que fluyen hacia el mercado bursátil del país y a través de la inversión extranjera directa.
“Hoy tuvimos una situación de estrés que se originó principalmente en Estados Unidos. Hubo un aumento de la especulación y los inversores migraron a los bonos de corto plazo desde los bonos de mayor madurez”, dijo a reporteros en Sao Paulo, refiriéndose a una liquidación de la moneda brasileña y los mercados de deuda.
El real brasileño cerró con una baja de un 0,9 por ciento a 2,4152 unidades por dólar, sumándose a las pérdidas de la semana pasada de más de un 5 por ciento, incluso después de una fuerte intervención del banco central.
Analistas dijeron que el real podría seguir debilitándose hacia 2,5 unidades por dólar en el corto plazo, mientras que otros dijeron que podría caer hasta 2,70 unidades por dólar a fines de año.
Pero, al reiterar los comentarios hechos por el jefe del banco central Alexandre Tombini anteriormente el lunes, Mantega advirtió a los inversores no hacer apuestas unilaterales contra la moneda.
“Es natural que los inversores quieran ganar dinero, pero ellos podrían perder dinero en el futuro”, dijo, agregando que Brasil tiene una tasa de cambio de libre movimiento que “fluctúa en ambas direcciones”.
Mantega dijo que el Gobierno tiene varios instrumentos para intervenir en su mercado de monedas, incluidos sus 370.000 millones de dólares en reservas internacionales y que el banco central y el Tesoro están trabajando juntos para estabilizar a los mercados financieros. Reuters