“Hasta después de morir debemos tener dinero”, dijo la ciudadana Carmen Torres, quien aseguró que un servicio funerario puede llegar a ser más costoso que el alquiler de una agencia de festejos.
Sin embargo, así como se organiza una fiesta, las funerarias ofrecen opciones a los familiares del difunto.
En el Grupo Vallés Oriente C.A. los precios varían. Según el gerente de Mercadeo y Ventas de la empresa, Javier Montoya, el servicio básico tiene un costo de Bs 5 mil y comprende el velado en residencia, sillas, un ataúd muy sencillo, el catafalco, set de cruces, cortinas, kit de cafetería, tanatopraxia (preparación del cadáver para evitar su rápida descomposición) y el traslado del cuerpo de la casa al cementerio en un vehículo sencillo.
El servicio más lujoso, con velación en la capilla imperial puede llegar a tener un valor de Bs 30 mil.
Montoya aseguró que las funerarias son empresas como cualquier otra. “La gente cree que los precios los colocamos porque queremos, en realidad todo está muy costoso y los precios se estipulan de acuerdo con el gasto que se tiene tanto en pago de nómina como en el mantenimiento de los vehículos y la capilla”.
Servicio social
En Barcelona existe la Fundación de Contraloría Social y Servicios Funerarios que se encarga de solicitar a las diferentes funerarias de la zona, ayuda para las personas de menos recursos.
El presidente de la organización, José Magallanes, manifestó que a través de la fundación han conseguido muchas donaciones de urnas para beneficiar a quienes no tienen dinero para adquirirlas.
Es por ello que solicita a los dueños de estos establecimientos que trabajen de la mano con los consejos comunales y fundaciones para brindar ayuda y asesoría a personas de bajos recursos económicos, con el fin de que puedan darle el último adiós a un familiar.
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