En la calle ayer se hablaba de cómo, supuestamente, Rosa María Manzano, una jovencita de 18 años asesinó a su niña minutos después de parirla, publica El Tiempo de Puerto La Cruz.
Muchos condenaron el hecho, incluso las parturientas que están recluidas en la sala de Observación en el piso cinco del hospital Luis Razetti de Barcelona. Ellas le hacían fotos con sus teléfonos a la muchacha acusada y le recriminaban: “¿por qué no la regalaste?”. Otras querían “lincharla”, o por lo menos eso se rumoraba en los pasillos del hospital.
También corría otra bola, que después policías y usuarios del Razetti confirmaron: “A la niña la trajeron en un tobo“. Así la llevaron al nosocomio cuando funcionarios de Protección Civil (PC) auxiliaron a madre e hija en su casa del sector Camino Nuevo, en Barcelona.
Los funcionarios señalaron que fue la propia chica quien colocó a su bebé muerta en el recipiente de plástico.
El domingo, mientras se afeitaba en el baño de su casa, a la chica se le presentaron los dolores de parto.
Allí mismo, en el piso y semi inconsciente, dio a luz a la bebé. Cuando Rosa escuchó el llanto, se desesperó y le realizó varias heridas con la hojilla con la que se rasuraba, causándole la muerte.
Murió desangrada
En horas de la mañana de ayer, en la morgue del hospital Luis Razetti se llevó a cabo la autopsia a la niña.
El diagnóstico forense reveló que fue degollada. Además, tenía cuatro heridas cortantes en el tórax y una en el abdomen que le provocaron un shock hipovolémico (murió desangrada).
El comisario José Alexander Rivero, jefe de Polianzoátegui, informó que la presunta homicida está hospitalizada y permanece bajo custodia policial en el área de Obstetricia del nosocomio capitalino.
Hoy será llevada a los tribunales de Barcelona para que rinda su declaración ante el juez IV de Control.