“Ahora tengo más cuidado con los aparatos que uso y, por ejemplo, si tengo el aire encendido mucho tiempo o si mis luces y televisores están encendidos sin que nadie los use corro a apagarlos. Aprendí a no derrochar energía, pero lamentablemente fue desde que fui multada por Corpoelec en julio pasado con un 200% del valor de mi factura. Mis recibos son de 300 bolívares y la última vez pagué más 1.000 bolívares”.
Esta fue la reacción de Carolina Moronta, residente de la zona norte de Maracaibo, ante la eliminación de los topes de consumo y recargos en facturas eléctricas, publicado el pasado martes en el artículo 1 de la Gaceta Oficial No. 40.236.
Allí fue divulgada la derogación de la resolución No. 080, publicada el 9 de septiembre de 2011.
Aunque estas recargos en la factura representan —según el Gobierno— una forma de crear conciencia sobre el uso de la energía, muchos usuarios, especialmente en la región zuliana, calificaron estas recargas de un castigo debido al intenso calor del estado.
Otro consumidor, Manuel Paz, residente del sector Amparo, comentó sobre estas recargas en la factura. “En febrero pasado tuve que pagar Bs. 696 por electricidad, cuando siempre cancelo Bs. 150. Creo que las multas son un castigo, pero también enseñaron a la gente a no derrochar energía, a usar solo bombillos ahorradores y a regular el aire acondicionado. Espero que no apliquen estas multas en el país”.
Para César Quintini, ingeniero y exmiembro de la junta directiva de Enelven, “desde el punto de vista técnico, esta derogación significa que ha logrado tener mayor capacidad de suministro y considero que son los usuarios quienes deben sentirse más aliviados”, manifestó.
Cuando fueron anunciadas las cinco resoluciones para reducir el consumo eléctrico de hasta 20% , dentro de estas medidas se incluyó el cobro de recargos a usuarios residenciales y comerciales, que no lograran una reducción de la demanda energética y se aplicaron incentivos si mostraba una disminución
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