Propietarios de panaderías y areperas Venezuela se las ingenian para producir sus productos con los pocos insumos que les aporta el Gobierno Nacional, ya que no les alcanza para cubrir su demanda.
Los trabajadores se ven en la obligación de comprar la materia prima en las empresas privadas para así lograr mantener surtidos sus establecimientos.
La red de distribución de Panaderías Venezuela les otorga un cupo a los vendedores, el cual mensualmente les expende entre 20 y 30 sacos de harina cada uno de 45 kilogramos.
Los productores deben ir hasta la sede de PDVAL en la Zona Industrial III, para comprar los sacos de harina en 248 bolívares. Sin embargo la cantidad suministrada por el gobierno no les alcanza para mantener durante todo el mes los mostradores full de diferentes tipos de panes, por lo que recurren a las empresas privadas y lo compran hasta en 450 bolívares el saco.
Más información en Prensa de Lara/David Padrón