Una mujer de Ohio que encontró los restos cremados de su hijo adolescente en una bolsa de plástico de un supermercado dentro de una urna se molestó con la funeraria de Kentucky que manejó la cremación. AP
Nancy Bronner, de Amelia, en el suroeste de Ohio, dijo que se disgustó cuando abrió la urna de su hijo en septiembre del año pasado y descubrió que sus cenizas estaban en una bolsa de una tienda de la cadena Wal-Mart.
“No me importa quién sea uno, no es correcto poner las cenizas de una persona en una bolsa de Wal-Mart”, dijo Bronner a WCPO-TV.
“Es una falta de respeto”, dijo Bronner, que está considerando presentar una denuncia ante las autoridades estatales. “No se le hace eso a un padre que perdió a su hijo. Eso no se le hace a nadie”.
Su hijo, T.J. Mitchell, murió a los 17 años de una enfermedad del corazón.
Bob McDaniel, de McDaniel Funeral Home en Dry Ridge, Kentucky, dijo que la familia le pidió dividir las cenizas en cuatro contenedores que no cerraban y no tenía bolsas, por lo que utilizó lo que tenía.
Dijo que recortó las bolsas para que no mostraran el nombre de la tienda o el logotipo. Bronner dice que aun así era reconocible que se trataba de una bolsa de Wal-Mart.
Thomas Mitchell, padre de T.J. y ex marido de Bronner, defendió la decisión de la funeraria y dijo que todavía guarda las cenizas de su hijo en la bolsa original que le dieron.