Para el diputado de la Asamblea Nacional por el estado Táchira Abelardo Díaz, el gobierno regional del capitán José Vielma Mora embaucó a los tachirenses con un sinfín de promesas que nunca cumplió y que por el contrario, “lo que vemos en cada una de las áreas del quehacer regional es todo lo contrario a las villas y castillos ofrecidas en su campaña electoral, olvidándolas por completo al dirigir un gobierno que parece sufrir de Alzheimer”.
Recordó el parlamentario, que en su campaña habló mucho de paz para el estado, “y hoy vemos un estado anarquizado y colapsado producto de la improvisación y la ineficiencia de una gestión que no arrancó y que prefirió perseguir, acorralar y maltratar al ciudadano antes que asumir con políticas efectivas, la solución a los graves problemas del Táchira”.
“Que cada organismo asuma sus competencias, el Táchira necesita un gobernador, no un señor con delirios de policía, guardia nacional y agente del Seniat, sólo para perseguir a los ciudadanos, mientras las grandes mafias siguen haciendo de la suyas con plena complicidad de quienes gobiernan, prueba de ello, el sufrimiento que nos generan las grandes colas para surtir gasolina ya que el chip se convirtió en un antro de corrupción roja y no terminó resolviendo el problema ni de la escases, ni mucho menos del contrabando de combustible, sumado a el maltrato que a diario sufren los ciudadano de frontera”, señaló Díaz.
Asimismo Díaz planteó varias interrogantes, “¿Qué pasó con la promesa de llevar el diferencial cambiario a la par entre el bolívar y el peso? ¿Qué pasó con las 15 mil viviendas para ser entregadas en 30 de septiembre? ¿Qué pasó con el Hospital Central de San Cristóbal, donde el tomógrafo no sirve desde hace 7 meses y atraviesa su peor crisis? ¿Qué pasó con los recursos en dólares anunciados para diferentes obras de vialidad entre ellos el enlace vial a Palo Gordo y el distribuidor de la antigua ULA? Sencillamente promesas lanzadas al olvido por el gobierno del Alzheimer”.
Con el caso de los motorizados el parlamentario destacó que, “vimos como la improvisación y la falta de diálogo y acuerdos previos con un importante sector de la sociedad, terminó generando un caos extremo en la cual nos vimos afectados todos los tachirenses, un buen gerente debió reunirse, escuchar los planteamientos de los motorizados, llegar a acuerdos que no perjudiquen a no ningún sector y luego sí tomar las medidas pertinentes, no disparar primero y averiguar después”.
Finalizó el parlamentario de la tolda verde, diciendo que el Táchira sigue sumido en el desabastecimiento, la inseguridad desbordada, el colapso total; colas por todo y para todo, “cada día la calidad de vida del tachirense se deteriora más, el dinero se lo comió la inflación y mientras tanto el gobernador sólo declara pero no gobierna”.