A Elizabeth González, de 33 años, le prendió fuego su pareja, Félix Torres, el pasado 15 de octubre. Supuestamente fue en una pelea cuando la roció con gasolina y le lanzó un fósforo. Sus hermanos la llevaron al Hospital Central de San Juan de los Morros, estado Guárico. laverdad.com / Ana Karolina Mendoza
La familia lo acusa, pero ella nunca ni estando recluida en la Unidad de Cuidados Intermedios, aceptó que su marido por más de cinco años, la atacó para matarla. “Lo defendió hasta su último aliento”, contó la hermana, Yarisbel González.
A Elizabeth la enviaron la semana pasada al Hospital Universitario de Maracaibo, porque en la Unidad de Quemados del Hospital Coromoto supuestamente no hubo cupos. Tenía heridas de tercer grado en el 80 por ciento del cuerpo. Y el pasado miércoles, a las 10.00 de la mañana, le dio un paro respiratorio.
Su hermana se desvaneció en la entrada de la morgue forense de la Universidad del Zulia al salir. Vio el cuerpo de Elizabeth en carne viva, envuelto en gasas amarillentas y húmedas. La acompañaba otro hermano. Ambos pidieron dinero prestado para viajar a Maracaibo para acompañar y llevarse el cuerpo de Elizabeth.
“La mujer ejemplar, la mejor madre, hermana e hija. La mujer justa que ayudaba a todos, pero que no supo ayudarse ella misma al terminar con Félix”, se lamentaron sus hermanos, mientras describían a la víctima como un “gran ser humano”.
González dejó a una adolescente, de 13 años, bajo responsabilidad de sus hermanos. La madre tiene problemas cardíacos. No sabían cómo darle la mala noticia. Los familiares desconocían qué había sucedido con el presunto agresor. Desde el incidente nadie en la comunidad ni de sus parientes se han tropezado con él. Temen que haya huido.