La orgía acabó mal, que uno de sus participantes no sabemos si podrá o querrá repetirla.
El caso se dio en Málaga, España, cuando un hombre, de mediana edad que estaba tomando en un club, decidió estar con tres chicas a la vez.
Subieron a una de las habitaciones y tras finalizar la orgía llegó el momento de pagar.
La cuestión provocó una fuerte discusión ya que las meretrices le reclamaban 70 euros por cada una de ellas pero el cliente dijo que a una de ellas no la pagaría.
La prostituta, ni corta ni perezosa, sacó un arma blanca y le seccionó el pene.
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