¿Quién no recuerda comprar en la cantina del colegio un Papaúpa, un rockolate… o recordar las fiestas de niños donde los cotillenos venían llenos de deliciosos caramelos, chocolates, etc?.
Aquí les dejamos una lista de las chucherías “de ayer” que los venezolanos recordamos y que por alguna u otra razón nos traslada a maravillosos tiempos.
1. Los dichosos “muñequitos”: marsmellow tieso de colores chillones, con forma de muñeco dormido (o muerto, lo mismo da) que venía en presentación individual y en sabores-colores: verde-limón, rosado-fresa, naranja-naranja, amarillo-piña, hasta donde nos alcanza la memoria.
2. Tabaquitos: bombones de chocolate cuya forma y envoltura hacía pensar en un tabaco. Venían rellenos de una crema muy rara de fresa o naranja y cuando se guardaban en los bolsillos y se aplastaban, eran lo mejor.
3. Mints: pequeños caramelos de menta, en forma de diminutos dientes, que se pegaban a los dientes reales en forma de pegoste. Venían en bolsita transparente con letras verdes.
4. Chocolates El Rey de Menta y Naranja: Se llamaban Chuao y fueron una suerte de antecesor de la onda superrefinada del chocolate El Rey que hoy conocemos (y amanos, vale decir). Chocolate oscuro con pedacitos de caramelo de menta o tiritas de naranja. Simplemente, es triste que hoy en día no existan.
5. Drácula: helado de Tío Rico que consistía en una suerte de pastelado con centro de sirope de cereza ácida (muy artificial, es cierto). Inolvidable.
6. Galletas Media Luna: una especie de Galleta María gigante, picada por la mitad, en forma de media luna. Venían dos juntas, pegadas barriga con barriga por un pegoste de mermelada de guayaba. Mi abuela Belén no las pelaba para la merienda, con un buen vaso de Toddy.
7. Galletitas con suspiro: Diminutas galletas, medio saladonas, que tenían en el medio un suspirito tieso y de colores. Uno solía separar la galleta del suspiro y comérselos por separado, disfrutándolos largo rato. Venían también unas barquillas con suspiro, imitando un helado, por las que como a los cinco años estuve a punto de morir aplastada por un pesado gabinete.
8. Papaúpa: Palo de chicle, como del tamaño de una señorita, en presentaciones de tutti fruti y banana. Estoy convencida de que esa gente que viaja a Margarita y se trae ese chicle espantoso “por yardas” tiene un issue atávico con el papaúpa que no logra resolver.
9. Sacamuelas: En las piñatas uno era capaz de matar por estos caramelos. Superpegostes redondos, de sabores y colores inciertos que se pegaban irremediablemente a nuestros molares y nos hacían gozar de la delicia de despegarlos, mientras nos llenábamos la lengua de azúcares innecesarios para la dieta. Toda una delicia.
10. California: Una única y tiesa gomita, de forma rectangular, envuelta en papel celofán, cubierta de azúcar y que producía una extraña sensación de desamparo una vez que devorábamos el último bocado. (Sin importar cuántas se comiera uno).
11. Paspalito: Parecidos a una galleta Susy, pero de sabor a queso; ya no hay nada que se les parezca a los paspalitos.
12. Salvajitos: caramelos duros y con un toque ácido, en sabores de frutas que tenían cada cual una personalidad que rimaba: Fresa Sorpresa, Pera Rumbera, Mandarina Sifrina, Uvita Loquita, Limón Llorón ¿Cuál era tu favorito?
13. Chocomenta: Un caramelo duro sabor a menta dulce y con un suave relleno e chocolate. Era una combinación perfecta de sabores y venía empacado en forma de tubito.
14. Frunas: caramelitos cuadrados y chatos, masticables y con muchísimo sabor que apenas al colocarlos en la boca se hacía agua. La versión actual existe, pero (oh, sorpresa) preferimos la vintage.
15. Barrilete: El tricolor -blanco, amarillo y rosa- de este caramelo masticable alargado y envuelto en un papel amarillo arruchado en los extremos, y su olor a tutti frutti siempre nos reuerda a nuestra infancia.
16. Vaca Vieja: Aunque eran masticables, más de un diente de leche se despidió de nosotros con uno de estos sabrosos caramelos marrones.
17. Boliqueso: Cómo extrañamos a estas esferas crujientes, saladitas y livianas que nos acompañaron en incontables meriendas escolares…
18. Carlton: Galleta crujiente + crema de avellanas + brillante cubierta chocolate = lo máximo. Aun esperamos toparnos con uno de estos así sea sólo una vez más.
19. Rockolate: El Rock Star de las chucherías nostálgicas. Una barra de caramelo con arroz tostado cubierta de chocolate. Casi 16.000 fans en Facebook tienen razón: queremos que el Rockolate regrese.
Hay muchas más: los tamarindos en vasito, chicles Bazooka, la chupi-barrita, Nucita, el bip-bip, los pop rocks, el Rikitti, el Cruch, las Sorbeticos, los mini-chiclets, prestigio…
Con información de Lavativario y Cocina y Vino