Es de nuestro interés dar a conocer las razones por las que hemos decidido ejercer nuestro derecho al sufragio de manera inversa, es decir, absteniéndonos de votar.
En primer término queremos dejar claro, que sentimos que es nuestra obligación respetar los puntos de vista de las otras personas aunque no coincidan con los nuestros. Eso es el pluralismo democrático que preconizamos. Sin duda, los humanos presentamos una resistencia natural, quizás impulsada por el instinto de conservación y la necesidad de seguridad en lo que hacemos, a aceptar que hemos sido engañados. ¡Qué difícil es pensar que uno ha sido víctima de un engaño! Como decía Mark Twain: “Es más fácil engañar a la gente, que convencerlos de que han sido engañados”.
Antes de que nosotros, de manera voluntaria comenzáramos, a revisar técnica y jurídicamente el sistema electoral, votábamos confiando en que los “dirigentes” se ocupaban de los detalles y de la defensa del voto. Y al estudiarlo y conocer el monstruo por dentro, nos dimos cuenta de que nos habían ocultado la verdad. Solo entonces, nos convencimos de que fuimos engañados.
En cantidad de ocasiones nos hemos encontrado con algunos amigos y vecinos, que sabemos que son personas honestas y serias, y cuando tocamos el tema del voto nos responden con que “el voto es un acto cívico, y una manera de protestar sin acudir a la violencia. Que votar es un deber moral”. Más aún, tratan de persuadirnos de que si esta vez vamos masivamente a votar, será casi imposible que hagan trampa, porque señalan, “el único voto que se pueden robar es el de la persona que no fue a votar”.
Estos vecinos y amigos comparten algo en común con nosotros: no somos dirigentes políticos, no aspiramos a cargos de elección popular, no cobramos por estudiar el sistema electoral en profundidad, y lo más importante, queremos que Venezuela salga de la pesadilla llamada 5ta República, ésa que nació del Pacto Militar del Samán de Güere.
A este grupo de personas de buena voluntad, a los que apreciamos y queremos, les pedimos que lean con calma nuestras razones para no votar el 8D. Estamos persuadidos, de que a partir del 9D nos tendremos que sentar juntos a repensar la manera de actuar, en un país que transita y profundiza a toda velocidad, su peor crisis moral, política, social y económica de los últimos 100 años.
Nuestras razones para ejercer el derecho de NO VOTAR el 8D son:
Primera: EL ESFUERZO ANTIFRAUDE PREVIO AL 7O. Ha sido público y notorio nuestro esfuerzo para evitar que el CNE nos hiciera fraude, y apoyar a la dirigencia de la oposición en materia de definir las condiciones mínimas para que se garantizaran ELECCIONES AUTÉNTICAS. De cara a la elección presidencial del 7O, un grupo importante de organizaciones especializadas y técnicos independientes alertaron al Comando del candidato Capriles respecto a la imposibilidad de ganar sobre la base de las condiciones electorales preexistentes, y mucho menos si se dejaba instalar el sistema SAI. El especialista electoral Eric Ekvall coordinó reuniones con la jefatura del Comando, con los asesores estratégicos y con el propio padre del candidato. Se les explicó con claridad la importancia de reivindicar condiciones electorales para la elección del 7-O. Se hizo énfasis en la gravedad de haber aceptado que un millón y medio de personas no tuvieran huellas registradas (buscar acta traición en www.votolimpio.info). Pero nunca se logró que el candidato recibiera a estos expertos. Fue como hablarle a un sordo y ciego. Para dejar huella histórica de este enorme esfuerzo realizado, los participantes les entregaron cartas a los dirigentes del comando (http://bitakoraeva.blogspot.com/), y paso seguido organizaron la Declaración de Caracas en agosto de ese mismo año (http://declaraciondecaracas.blogspot.com/).
Segunda: CAPRILES Y LAS CONDICIONES ELECTORALES. La declaración pública y notoria del liderazgo de la MUD y del candidato, en la noche del 14A, fue: “nos robaron la elección”. Gritaron FRAUDE, y reclamaron que se cumplieran tres de las condiciones electorales exigidas por los objetores del sistema electoral: “auditoría integral de los cuadernos electorales (el Registro Electoral), auditoría de huellas registradas por las captahuellas, y el conteo de todas las papeletas de todas las urnas”. En los días siguientes, la MUD, por presión de la gente, le pedía a una ONG seria como ESDATA que se sentara en el grupo de las auditorías. Y en ese momento se hizo célebre la frase de uno de sus directivos: “queremos ayudar, pero no participaremos en auditorías chimbas”. Y cual fue la realidad: no se realizó la auditoría en profundidad.
Tercera: PASAR LA PÁGINA DEL 14A. Pasado el mes de agosto, vimos con sorpresa, que estos mismos actores decidieron pasar la página del FRAUDE, para volver a hablar de ventajismo, trucos y trampas. Hoy nos invitan a votar como si lo del fraude se hubiera resuelto, o peor aún, como si no lo hubieran mencionado nunca.
Cuarta: DE ILEGÍTIMO EN ILEGÍTIMO. El actual CNE tiene a 3 rectores con los períodos vencidos. Es decir, las autoridades de este CNE ocupan los cargos en forma ilegítima. Los voceros de la MUD continúan hablando del “ilegítimo”. Pero ahora aceptan que un CNE “ilegitimado” por no tener rectores, organice la elección del 8D. ¿Cómo se explica esa incongruencia? El evento del 8D nació ilegítimo, y esto representa un hecho moralmente inaceptable: la convalidación de actos ilegítimos como práctica comúnmente aceptada.
Quinta: EL 8D: ¿PLEBISCITO o MAPA ROJO? La cúpula de la MUD y el Sr. Capriles, no contentos con pasar la página del fraude y no continuar el procedimiento legalmente previsto para impugnar aquellas elecciones, no fueron selectivos en el planteamiento político del 8D. Quizás hubiéramos estado más proclives a pensar en el sufragio positivo, es decir el voto, si, por ejemplo, la MUD hubiera llamado a votar masivamente donde siempre se ha ganado (50 a 60 alcaldías de 335), y a la abstención masiva donde siempre se pierde por el diseño fraudulento de los centros electorales con su elemento complementario llamado efecto del Factor Miedo. Así se potencia la posibilidad de que un amplio sector descontento del oficialismo también se abstenga, contribuyendo con ello a acentuar la responsabilidad del Régimen en la crisis nacional en puerta. Pero no fue así. Con el cuento del Plebiscito, le siguen creando falsas expectativas a los ciudadanos en más de 250 municipios. No se puede perder de vista que la oposición, en su mejor momento, la elección presidencial del 14A, según la caja negra del CNE, “perdió” en el 71% de las mismas. Es relevante recordar que el 8D también se vota por la elección de concejales, y que para ello modificaron los circuitos electorales a finales del 2012, justo antes de la elección de Asambleas Legislativas y Gobernadores. El efecto devastador, y violatorio del principio de Representación Proporcional, que significan esas modificaciones de circuitos electorales, lo vivimos en la elección de la AN en el 2010, y en la elección regional de diciembre 2012, donde solo se ganaron 3 gobernaciones, pero apenas se obtuvo 1 asamblea legislativa, que por cierto, no fue ni la del Estado Lara ni la del Estado Miranda. El Régimen, en la noche del 8D, con su gran aparato de propaganda y mapa en mano, declarará que el pueblo quiere más revolución, y que la Venezuela municipal es roja rojita, porque ganó en la gran mayoría de alcaldías y cámaras municipales, y todo ello, con la participación electoral activa de la oposición.
Sexta: EL MUNICIPIO LIBERTADOR. Libertador es al 8D, lo que representaba la presidencia del Sr. Maduro cara al 14A. Ese es un espacio donde nunca permitirán que gane la oposición. Y para ello tienen control del CNE. Además, el candidato de la MUD es un personaje señalado públicamente y acusado ante la Corte Penal Internacional en La Haya por su participación en los hechos sangrientos ocurridos durante los sucesos del 11 de abril del año 2002.
Séptima: MÁS SOBERANÍA PERDIDA. La convalidación reiterada de autoridades ilegítimas producto de elecciones fraudulentas, nos lleva a un camino, políticamente hablando, muy peligroso: las termina legitimando frente al mundo. Y con ello, se consolida aún más el daño a la soberanía nacional, dándole cabida a más injerencia cubana, china, rusa e iraní, que entre otras cosas, trae como consecuencia más subordinación de la institución de la Fuerza Armada Nacional a esos intereses foráneos. Y eso termina golpeando la dignidad de los ciudadanos, que seguiremos metidos en un sistema “sui generis” de racionamiento, confiscaciones express y criminalización sistemática de la protesta cívica.
Octava: MENSAJE CONTRADICTORIO. Todos los países del mundo nos ven como un país “normal”. Unos ciudadanos que concurren a elecciones, no protestan en las calles, con una oposición que “cumple” el cronograma electoral, dice que las auditorías están todas bien, y somete a la consideración de los ciudadanos unos candidatos para oponerlos al gobierno. A los ojos de la comunidad internacional AQUÍ NO ESTA PASANDO NADA GRAVE. Lo que estamos proyectando como país, es que este es un gobierno democrático que por ahora gana elecciones, pero que un día saldrá también por elecciones. Y todos sabemos que eso no es verdad. En la medida que todos participemos de esa conducta que le da apariencia democrática al Régimen, será muy difícil conseguir los apoyos necesarios para denunciarlo como una DICTADURA
Novena: EL DIA SIGUIENTE. Mucha gente cree que si no votamos el 8D seremos arrasados y no habrá un día siguiente. Pero en realidad, “el día siguiente” ya pasó hace años. Cada quien pensará una fecha para ese evento “catastrófico”. Pero lo cierto es que no es el 8D. No aceptamos el cuento de que no votar el 8D es facilitar que se pierda el partido por “forfeit”. El juego, electoralmente hablando, se perdió desde el momento que se permitió la instalación de un sistema electoral controlado por el gobierno.
Décima: EL VOTO ES UN INSTRUMENTO DE LA DEMOCRACIA. Dejaremos de votar no porque no creamos en la institución del voto para cambiar gobiernos en democracia. No votaremos el 8D, ni en elección alguna que venga en la que no se reivindiquen condiciones electorales básicas, porque el “voto dócil y ciego” no es un instrumento para cambiar dictaduras, sino por el contrario, es precisamente el instrumento que las legitima a los ojos del mundo. Las dictaduras se cambian cuando la población decide desnudarlas y enfrentarlas, y en nuestro caso eso pasa entre otras cosas por denunciar abiertamente el perverso sistema electoral venezolano.
Estas 10 razones son para nosotros más que suficientes para no seguir el juego electorero que ha sumergido a la sociedad en una peligrosa calle ciega. No podemos avalar el engaño promovido por políticos y técnicos.
En un país que lleva 14 años comprando número para una lotería arreglada en la que solo ganan los dueños de la lotería, no perder nuevamente esfuerzo y esperanza tiene muchas ventajas, empezando por salirse del juego del gallo pelón, que hasta los niños pequeños saben que no tiene solución.
Es hora de no ceder a la extorsión de las dos fuerzas polarizadas que exigen votar y satanizan al que no lo hace, calificándolo de traidor y de inmoral.
NO VOTAR es un camino claro que tiene el ciudadano de ejercer al menos uno de sus derechos de forma plena: el derecho a no participar en un sufragio trucado y fraudulento cuyos resultados, sea cual sea la voluntad del elector, serán los que convienen al régimen.
El 9D debe constituirse en una fecha que llame a un diálogo sincero de todos los demócratas de buena voluntad, tanto a aquellos que decidieron votar por sentir que era una obligación moral, como a aquellos que decidimos ejercer nuestro derecho de no votar, también por razones morales de igual peso.
Suscriben
MARISOL SARRIA – ABOGADO
LUISA ELENA VIDAURRE – ONG “POR LA CONCIENCIA”
PABLO BRITO ALTAMIRA – ONG “POR LA CONCIENCIA”
LUIS MANUEL AGUANA – A.C. “FAMILIA METRO” – LIC. COMPUTACIÓN
LUDWIG MORENO – ONG VOTOLIMPIO – MEDICO
IÑAKI GAINZARAIN – LIC. MATEMATICAS