Diciembre es el mes de los excesos: exceso de gastos, exceso de celebraciones, exceso de bebidas, exceso de comidas. Pero si lograste cumplir tus metas en torno a tu peso y estado físico, ¿vale la pena echar todo a perder justamente el último mes del año? Obviamente no, pero tampoco puedes pasar un mes tan festivo acostándote temprano y comiendo ensalada.
Para tu tranquilidad, te traemos una estrategia completa que te ayudará a disfrutar los últimos días de 2013 sin tirar a la basura todas las horas de esfuerzo en el gimnasio.
1. Nunca te saltes las comidas
Son semanas donde corremos de un lugar a otro de la ciudad, luchando contra el tráfico de los centros comerciales, entre compromisos sociales y compra de regalos. No permites que ese exceso de diligencias te haga saltarte alguna comida. Respeta el desayuno, el almuerzo y la cena como siempre lo haces (siendo lo ideal comer cada 4 horas). Esto permite que mantengas tus niveles de energía y de azúcar en la sangre, algo que a su vez controla el apetito.
2. No descuides tus rutinas de ejercicio
En diciembre no cierran los gimnasios ni se congelan los parques. Respeta tu rutina de ejercicio. Levántate más temprano si tienes muchos compromisos que atender. Y si te acuestas tarde y eso evita el ejercicio matutino, aprovecha entonces la tarde. Siempre hay tiempo, es cuestión de organización.
3. Concéntrate en socializar, no en darte cada noche un banquete
Según la revista médica Cleveland Clinic, para controlar nuestro peso es estas semanas es importante que nos concentremos en las relaciones humanas. ¿Eso qué quiere decir? Pues que en una fiesta o compromiso social lo importante no es qué van a dar de comer, sino conversar con los amigos y familiares, pasar un buen rato.
Y mejor no te sientes cerca de la mesa donde está la comida.
4. Busca amigos aliados
Solo siempre es más difícil, pero si un grupo de amigos o familiares se ponen la misma meta, podría ser más sencillo. Pueden organizar cenas de con comidas más saludables y salidas para hacer ejercicio en grupo o actividades al aire libre, aprovechando los días de asueto.
5. Elige con sabiduría lo que vas a comer
Aumenta tu ración de ensalada y coloca menos arroz en tu plato, selecciona más proteínas y menos carbohidratos. No repitas pan de jamón, o mejor déjalo para el desayuno. Son las mismas reglas pero con platos especiales.
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