Algunos amantes de la cocina aseguran que cuando la comida se sirve en platos redondos de color blanco se ve mejor. Pero, ¿sabe mejor también? Parecen ser de rigor en establecimientos que sirven comida bien presentada y también son la elección común de quienes cocinan en sus casas. Informe21
“Servida en un plato blanco y limpio, la comida y sus colores serán el foco principal”, le explica a la BBC Kieran Lenihan, chef en el restaurante irlandés-italiano Farrells, de Bristol, Inglaterra.
“Los platos con dibujos o adornos le roban la atención a los alimentos y no dejan apreciar sus colores y texturas reales”.
Pero hay otra razón por la que los platos blancos y redondos atraen a los comensales y cocineros por igual: el color y la forma del plato influyen en la percepción del gusto, según revelan los resultados de una investigación.
Confirmado… pero no comprendido
Peter Stewart, profesor de psicología en la Universidad Memorial de Terranova, Canadá, y su compañera de investigación Erica Goss dirigieron un experimento para saber cómo la gente percibía el sabor de una torta de queso servida en platos blancos y negros, redondos y cuadrados.
¿El resultado? Los platos blancos y redondos mejoraron algunos juicios básicos.