Buena parte del país esperaba para Navidad la libertad plena o cuando menos una medida sustitutiva de libertad específicamente prevista en la Ley, por razones de grave deterioro de su salud, para el comisario Iván Simonovis. El suyo es el caso mas emblemático de los presos políticos pero igual se esperaba una medida semejante para varios otros presos políticos e incluso una Ley de Amnistía. Nada de eso ocurrió. Nicolás Maduro decidió –tras su viaje a Cuba para discutir con Raúl Castro y la jerarquía cubana la “línea” política a seguir tras el 8D- ocupar un puesto en la pequeña historia al negar todo. “Yo estoy impedido por la ley para otorgar ese indulto porque él cometió delitos de lesa humanidad”, dijo (mintiendo) para justificar y agregó: “En el país no hay presos políticos y este funcionario no es ni fue dirigente político, sino un funcionario público que incurrió en delitos, delitos graves”.
¿Simonovis fue condenado por delitos de lesa humanidad, como dice Maduro para justificarse?. En lo absoluto. No hay ni la más mínima referencia a ello en la sentencia de su juicio. Los “delitos” por los que se le juzgó y condenó son delitos comunes. Incluso muchos partidarios del gobierno, sometidos a la intensa y virulenta campaña de odios desde el canal 8, se sorprenderían si descubren que de los 19 homicidios ocurridos aquel 11 de Abril, el gobierno, el poder judicial y la Fiscalía solo han hecho juicio por dos casos. Los otros 17 no tienen ni siquiera juicio abierto, imputados ni nada. Es fácil suponer por qué. Los responsables -o presuntos responsables- serían todos del lado oficial.
El abogado José Luís Tamayo lo ha explicado claro: “La actual Fiscal General, Luisa Ortega Díaz no solicitó en la acusación que fuera castigado por delitos de lesa humanidad y violaciones a los DDHH. Tampoco lo solicitaron en la audiencia preliminar de marzo de 2005, ni lo plantearon los fiscales durante el juicio. Por lo tanto, la juez no podía condenarlo por algo que no se le pidió”. Para millones de venezolanos, Simonovis y los PM fueron los “chivos expiatorios” para justificar una historia tergiversada de aquel 11-A. Eso será materia de alguna “Comisión de la Verdad”, amplia, independiente, que mas temprano que tarde existirá no para ejecutar venganzas -sería terrible repetir al chavismo pero al revés- sino para conocer la verdad.
El mismo Tamayo explica que en la sentencia de la juez M. Calderón se establece que el “delito” de Simonovis habría sido “cómplice necesario” porque según ella “el comisario estaba en la capacidad de controlar y disipar” a los manifestantes el 11-A y no lo hizo. Es decir, “no fue condenado por dar órdenes de disparar y de matar el 11-A”. El abogado también detalla en su cuenta de twitter un caso público y notorio: el ex magistrado presidente de la Sala Penal del TSJ, Aponte Aponte, confesó al huir del país, que cuando los abogados recurrieron a esa Sala para hacer revisar la sentencia “inadmitió el recurso de casación “sin siquiera haberlo leído, pues la orden era “salir de eso de inmediato”. La Sala Penal, confesó Aponte convalidó “todo lo que venía hecho”, y que eso era por “aceptar que esos señores no podían salir, pues”. Delitos muy graves, esos sí. Según Aponte, todo eso se decidía “en la reunión de los viernes en la vicepresidencia”.
Maduro, sin embargo, dijo que la decisión de medida humanitaria (expresamente prevista en la Ley y que ya tiene muchos meses de retraso) correspondería, en todo caso, el poder judicial. No hay jueces independientes para casos de ese tipo, por lo que en el Psuv se comenta que Maduro no quiso tomar la decisión para no quedar mal con sus grupos mas extremistas y fanáticos que lo presionan y que dejaría -como si no tuviera nada que ver- que lo anuncie al juez del caso que tiene meses retrasando la decisión. Típico de un gobernante débil con escaso piso político propio. Otros piensan que no. Que siguiendo el “estilo Fidel”, no habrá medida humanitaria “para no demostrar debilidad”. Fidel, responsable de un asalto armado a un cuartel militar con muchos muertos, recibió medida humanitaria del dictador Batista (presionado por la comunidad internacional, no porque el dictador militar fuese “buena persona”) y tras dos años de cárcel lo enviaron al exilio. Luego, una vez en el poder, fue un “duro” contra ese tipo de medidas para sus adversarios. Hubert Matos, relevante jefe de la Sierra Maestra, preso luego por oponerse al giro comunista de la revolución, pasó encarcelado los 20 años de su condena (en condiciones infamantes, además) pues Fidel jamás aceptó las peticiones de numerosos jefes de estado y personalidades para liberarlo antes.
Leido en twitter: 1.- @Zapatazos: “Mantener preso a un enfermo grave como Simonovis es un tenebroso crimen de lesa humanidad”. 2.- @conexionRCLLigia Bolívar, del Centro de @CDH_UCAB de la UCAB: @Simonovis enfermó por condiciones de reclusión 3.- @JoseAGuerra “Respecto al caso @Simonovis a mi @dcabellor se me parece mas a Miguel Silvio “Tabaquito“ Sanz que a Pedro Estrada. Que crueldad acumulada”. 4.- @Simonovis “A todos quienes me leen les deseo paz en el 2014. Disfruten este día 31 de diciembre con sus familias. No imaginan la suerte que tienen de poder hacerlo”. 5.- @Simonovis “Gracias a todos por sus mensajes de apoyo. Les prometo que voy a resistir!”. 6.- @jmaller “El débil no puede perdonar, el perdón es un atributo del fuerte. Mahatma Gandhi (Liberen a @simonovis)”. 7.- @damianprat “Los golpistas del 92, pese a sus graves delitos, recibieron indulto generoso. ?Por qué ahora son mezquinos y crueles?”. 8.- @HebertoDiazO Los golpistas del 4F y del 27N de 1992, no eran de Partidos Políticos y se les trato como presos políticos!” 9.- @OscarDLeon “Jamás he pedido nada… pero hoy quiero rogar por la libertad de Simonovis.”. 10.- @mgrtscdr “Ningún gobierno admite tener presos políticos. Siempre inventan eufemismos para justificar la prisión.”. 11.- @barrioafuera “El perdón, no el encono ni el odio, ha sido una constante de nuestra tradición democrática. #LibertadParaSimonovis”.