El Gobierno nacional está al tanto del negocio del envío fraudulento de remesas a Colombia y se prepara para activar nuevas medidas dirigidas a frenar este ilícito cambiario. El ejecutivo regional elaboró un informe que ya está en manos de Cadivi, informa La Verdad.
Por Daniela García / Maracaibo / [email protected]
Las solicitudes de moneda extranjera para el envío de dinero a familiares en territorio colombiano registraron un “aumento significativo” el año pasado, asegura Nelson Canquiz, secretario regional para Asuntos Administrativos, Políticos y Laborales.
Un informe elaborado por la Gobernación de Zulia para la Comisión de Administración de Divisas (Cadivi) precisa que “el 82 por ciento de los dólares que se aprueban para remesas va hacia Colombia”.
Del total de los “giros” de dinero para parientes residenciados en la nación neogranadina, al menos 75 por ciento está destinado a las ciudades más próximas a la frontera venezolana, detalla Canquiz.
Un negocio
Miles de dólares aprobados por Cadivi por concepto de remesas se fugan diariamente hacia territorio colombiano. La actividad se convirtió en un negocio con el que se desangra al país.
Las fuentes denuncian que las divisas no se usan para mantener a parientes residenciados en el extranjero, sino para retornarlas al país a través del mercado negro, trámite que permite obtener una rentabilidad gracias al diferencial cambiario.
“Hay quienes, tras obtener la aprobación (de Cadivi), hacen envío a las personas que tienen en Colombia. Luego viajan hasta allá para buscar el dinero, que no se usa para manutención, sino que se vuelve a cambiar a bolívares en la frontera al tipo de cambio paralelo. Eso les deja una ganancia considerable”.
Cupo de remesas
El giro de dinero a familiares directos (padre, madre, hijos, abuelos y nietos) está contemplado en la Providencia 096 de la Comisión de Administración de Divisas, que está vigente desde el 28 de mayo de 2009.
El ente regulador aprueba remesas por 300 dólares mensuales para cada familiar. Un ciudadano puede suministrar dinero hasta a tres parientes directos residenciadas en el exterior. En total, una persona puede tramitar 900 dólares simultáneamente.
“Se pueden manejar hasta 900 dólares; muchas de esas divisas retornan al país para alimentar el mercado paralelo”, denuncia Canquiz, quien reconoce que existen casos en los que las solicitudes ante Cadivi se hacen con papeles fraudulentos.
La ilegalidad
Las fuentes afirman que falsos documentos colombianos de residencia, cédulas de identidad, partidas de nacimiento y certificados de matrimonio y concubinato se utilizan para armar las carpetas que se entregan a la Comisión de Administración de Divisas para pedir la autorización de las remesas.
“En ocasiones las casas de cambio autorizadas -que prestan los servicios de giros- y Cadivi no pueden verificar los papeles que se traen de Colombia. Nosotros tendríamos que pedirle a nuestra Cancillería que se comunique con la Cancillería colombiana para revisar que los documentos sean válidos”, agrega Canquiz.
El secretario de Asuntos Administrativos, Políticos y Laborales de la Gobernación del Zulia afirma que en los próximos días el ente regulador anunciará medidas dirigidas a atender la situación.
“Entendemos que tenemos estrechas relaciones con Colombia, pero llama mucho la atención el auge de las solicitudes de divisas para remesas”, Nelson Canquiz, secretario de Asuntos Administrativos, Políticos y Laborales de la Gobernación
Envío de remesas
La Comisión de Administración de Divisas (Cadivi) asegura que en 2012 se procesaron 45 mil 530 solicitudes de dólares para remesas, para lo cual se aprobaron 855 millones de dólares.
El ente regulador aún no publica la data de 2013, pero las cifras preliminares aportadas por José Khan, presidente de la institución, apuntan a que solo en el primer semestre se autorizaron 500 millones de dólares para manutención de familiares en el extranjero.
El dato
Colombia tiene a Venezuela como el segundo país emisor de remesas para manutención de familiares -después de Estados Unidos-, por un monto de mil 100 millones anuales, de acuerdo con el último informe del Banco Mundial (BM).
El negocio
Una persona solo dispone de mil 890 bolívares para pagar una remesa de 300 dólares. Ese monto en el territorio hermano se convierte en 577 mil pesos. Cuando la moneda colombiana se cambia en la frontera se traduce en 16 mil 486 bolívares.
Si se comparan los mil 890 bolívares que se usan para hacer el giro con los 16 mil 486 que se obtienen por regresar el dinero al país, se obtiene una ganancia de 14 mil 596.