Dian Fossey se hizo famosa tanto por su trascendental trabajo científico, como con la espectacular repercusión que logró su libro “Gorilas en la niebla”, inmortalizado por el director Michael Apteden en una película que llevó el mismo nombre. Nació el 16 de enero de 1932, en San Francisco, y murió acuchillada en las montañas de Ruanda a manos de cazadores furtivos de esta especie.
Pasó gran parte de su vida viviendo en las montañas de la niebla, a más de 3.000 metros de altura, dispuesta a luchar por la preservación de los amenazados grandes gorilas que habitaban en la cordillera de los montes Virunga.
Logró con estos animales una conexión única, algo nunca visto anteriormente. Gracias a que la acompañaba a sol y sobre un fotógrafo de la National Geographic, esos momentos aún sobreviven. Sus investigaciones resultaron con el tiempo fundamentales para la conservación de estos simios casi extinguidos.
Al llegar al continente africano, Dian Fossey se asentó en una zona complicada -entre los volcanes Karisimbi y Bisoke-, utilizada por las tribus locales para cazar, relata La Voz de Galicia. Su principal objetivo era hacer un censo de los gorilas de montaña, pero pronto comenzó a relacionarse, incluso a interactuar sorprendentemente con ellos.
Este trabajo fue llevado al cine en el año 1988 bajo el mismo título dando lugar a un largometraje biográfico, cuyo reparto está encabezado por la actriz Sigourney Weaver, que fue nominada al Oscar a la Mejor Actriz por su papel protagonista.
Las circunstancias que rodearon a su muerte tardaron tiempo en esclarecerse. Muchos años después se supo que el autor del crimen había sido un cuñado del presidente ruandés y capo de los furtivos que se dedicaban a masacrar gorilas, informa el diario español.
Fuente: Infobae.com