El Gobierno argentino puso en marcha hoy un operativo de ayuda y asistencia a los afectados por la ola de calor, la tercera que vive el país desde el inicio del verano, con temperaturas que siguen en aumento y que superan los 40 grados centígrados en algunas zonas del país.
Los ministerios de Planificación, Seguridad, Desarrollo Social, Salud y Defensa desplegaron un equipo conjunto de trabajo por distintos barrios de la ciudad Buenos Aires, una de las ciudades argentinas más castigadas por el fuerte calor, donde hoy el Servicio Meteorológico Nacional (SMN) elevó la alerta a “nivel naranja”.
En un comunicado, la ministra de Seguridad Cecilia Rodríguez explicó que, por instrucción de la presidenta, Cristina Fernández, “se han articulado esfuerzos de todas las agencias del Estado para atender las consecuencias de la emergencia meteorológica desde hace casi un mes”.
El dispositivo prevé también los posibles fallos en el suministro eléctrico derivados de las altas temperaturas, como sucedió el pasado diciembre, y por ello en el equipo colaboran también electricistas de la Armada, el Ejército y la Fuerza Aérea.
Funciona también un centro de atención a usuarios para atender a los afectados por cortes de luz, de agua y otros servicios.
La alerta del SMN se extiende también a los alrededores de la capital argentina y a otras áreas del centro y el norte del país.
Las previsiones son que las temperaturas vayan en aumento a lo largo del fin de semana, y no será hasta el próximo martes cuando experimenten un descenso. EFE