Residentes del noreste de Estados Unidos buscaban el miércoles la forma de sobreponerse de la tormenta que dejó más de 30,5 centímetros de nieve en muchos lugares, interrumpió el tráfico y forzó al sistema educativo de Filadelfia a cerrar sus puertas.
El sistema climático de nieve y frío proveniente del Ártico llevó a la cancelación de más de 3.000 vuelos.
A última hora del martes, partes de Pensilvania y Nueva Jersey habían registrado 38 centímetros de nieve, dijo Stephen Corfidi, del Servicio Meteorológico Nacional.
Estados del noreste del país, incluyendo a Nueva York, declararon emergencias y advirtieron a los residentes que no viajen durante la tormenta de rápido movimiento.
Para el miércoles se espera una menor caída de nieve, pero neviscas tocarán partes de Nueva Inglaterra a medida que el sistema climático se mueve hacia el norte, dijo Corfidi.
“La historia real será un período de frío persistente como consecuencia de este sistema”, agregó.
Las temperaturas en el oeste de Pensilvania serán bajo cero (menos 18 grados Celsius) y muchas otras áreas del noreste no verán el termómetro subir por encima de menos 7 grados Celsius, dijo Corfidi.
Anticipándose al duro clima, Filadelfia cerró sus escuelas y todas las oficinas de la ciudad. En Nueva York, los niños tienen previsto ir al colegio el miércoles puesto que el sistema educativo iba a seguir operando, según el Departamento de Educación de la ciudad.
Metro-North, el servicio de trenes que conecta la ciudad de Nueva York con los suburbios, advirtió en su página web de posibles demoras vinculadas con el clima para el miércoles.
En medio de fuertes nevadas el martes, cientos de miles de trabajadores federales en Washington recibieron la orden de quedarse en casa. Colegios y oficinas de la ciudad también cerraron y la Casa Blanca canceló sus ruedas de prensa del martes.
El Gobierno federal tenía previsto funcionar el miércoles, pero los empleados contaban con la opción de tomarse el día o trabajar desde el hogar.
Las oficinas del Gobierno Federal inician hoy sus labores dos horas más tarde que lo habitual mientras el área metropolitana de Washington, cubierta por nieve bajo cielo despejado, experimenta temperaturas muy bajas.
Reuters