Saber usar los anticonceptivos es de vital importancia. El sitio tusemanario.com ha citado una publicación aparecida en cosmohispano.com, donde la Dra. Carmen Sala, miembro de The Doctors.es, responde a todos esos falsos mitos que se escuchan sobre diferentes anticonceptivos y que pueden llevarnos a utilizarlos mal. revistamujeres.cl
1. Los preservativos se rompen con facilidad.
No es cierto. La Dra. Carmen Sala cuenta que “la industria farmacéutica actualmente elabora los preservativos bajo un control de calidad óptimo lo que hace que sea muy difícil su rotura con un uso adecuado”. Eso sí, también nos recuerda que es muy importante conservarlos en temperatura y humedad adecuadas, y no usarlos con sustancias lubrificantes que pueden deteriorarlos.
2. Las píldoras antinconceptivas aumentan el vello, y engordan.
“Con los actuales preparados y las dosificaciones cada vez más bajas, es extraordinariamente raro que aparezcan este tipo de efectos secundarios”, afirma Sala. De hecho, opina que suele ser más bien al contrario.
3. Es suficiente usar el preservativo en el momento estricto de la eyaculación.
Según la Dra. Sala, este “es uno de los sistemas principales de fallo del preservativo, puesto que antes de la eyaculación hay fugas de espermatozoides que pueden provocar un embarazo”. Además, nos recuerda la doctora, “no siempre el varón puede controlar cuál será el momento preciso de la eyaculación”.
4. En la primera vez no nos podemos quedar embarazadas.
No es cierto, ya que va a depender del momento del ciclo menstrual en el que se esté y si se está en días fértiles o no.
5. Si tomamos la píldora anticonceptiva, hace falta hacer descansos cada 3, 6 ó 12 meses.
Esto sucedía con los preparados antiguos, con dosis muy altas y hormonas menos seguras. La doctora asegura que “hoy en día sólo se debe hacer descanso, si la mujer así lo desea, si quiere quedarse embarazada o, si por causas médicas, estuviera indicado”.
6. Para evitar las enfermedades de transmisión sexual, es suficiente usar el preservativo sólo en la eyaculación.
No es cierto, ya que, como dice la doctora, “la mayoría de las infecciones no se transmiten a través del eyaculado, sino por contacto de mucosa a mucosa”. Por tanto, es necesario usarlo desde el inicio de la penetración.
7. El D.I.U. (dispositivo intrauterino) provoca esterilidad.
En sí mismo, el D.I.U. es un método anticonceptivo reversible. “Podría provocar esterilidad si se asociara a una infección pélvica o a una endometritis, en cuyo caso ésta seria la causa”, afirma Sala, y “la incidencia de estas complicaciones está asociada a las prácticas sexuales de la mujer, al número de parejas, y a la aparición de enfermedades de transmisión sexual, más que al uso del D.I.U. en sí mismo”.
8. La píldora anticonceptiva puede provocar cáncer.
La Dra. Carmen Sala afirma que “todos los estudios señalan en sentido contrario, destacando la menor tasas de cáncer de ovario, de endometrio o de colon” en las usuarias de la píldora. De hecho, dice Sala, “la relación entre la píldora anticonceptiva y el cáncer de cuello, cada vez pierde más fuerza, sobre todo desde que se conoce su absoluta dependencia de la necesaria infección por el virus del HPV, y la asociación con el cáncer de mama, va perdiendo fuerza, con las nuevas bajas dosis, y los nuevos preparados”.
9. El “método de contar los días” es muy seguro para impedir un embarazo.
No es correcto. Carmen Salas afirma que “puede ser un sistema de mediana/alta eficacia, si se asocia a otros sistemas de detección del momento de ovulación (como el estudio del moco, o la temperatura basal) ya que los ciclos menstruales pueden variar mucho en su duración”.
10. Es fácil que el D.I.U. pueda perforar el útero.
La doctora defiende que “si la indicación fue bien hecha y la colocación por personal entrenado, es prácticamente imposible la perforación del útero ni durante la colocación, ni durante la vida útil del mismo”. Sin embargo, también advierte de que se “debe realizarse siempre un control postinserción para asegurarse de su localización adecuada”.