Turistas venezolanos y agencias de viaje siguen sorteando su suerte ante la actual atmósfera de incertidumbre que se vive en el sector turismo, publica El Impulso.
La migración de este grupo al Sistema Complementario de Administración de Divisas (Sicad), sumado a los cambios en la ley para asignación de las mismas y la deuda que aún mantiene el Gobierno con las aerolíneas internacionales hacen que el sector se vea deprimido y que las operaciones comerciales hayan mermado entre 90% y 95%, según información de Gonzalo Palacios, gerente de la Agencia de Viajes Lara Travel.
“Antes de que todo esto ocurriera mi agencia podía emitir entre 25 y 30 boletos diarios, entre rutas nacionales e internacionales. Actualmente, en un día positivo emito sólo cinco tiquetes y son todos nacionales”.
El agente de viajes comenta que la situación se ha mantenido así desde hace dos semanas y que en el sistema interno manejado entre agencias de viaje y aerolíneas para emisión de boletería escasamente aparecen cuatro o cinco opciones a destinos distintos por día.
Tal situación imposibilita la salida del venezolano al extranjero, sobre todo a grupos familiares, que no encuentran oferta de cupos .
“En este momento me es imposible armar un plan de viajes para una familia, ya que sumado a los altos costos de la boletería, no se encuentra disponibilidad de un mismo vuelo para varias personas”.
Bajo este panorama una factura por emisión de grupo familiar puede oscilar entre los 150 mil y los 200 mil bolívares, monto que no es cónsono con la propuesta de placer que venden a sus clientes.
Viajes a Florida
Importantes mayoristas nacionales y extranjeras, cuyo producto principal era Orlando, Florida, han decidido cerrar sus puertas en el país. Las razones son múltiples. Entre ellas el carácter familiar de este destino, el cual suelen visitar los padres con dos y tres hijos, grupo infantil al cual sólo asignarán un único cupo en efectivo de 500 dólares, según se establece en el artículo 29, de la nueva providencia. Sumado a la cuestionada asignación en tarjeta de crédito de 700 dólares para el destino.
“Florida no es un destino para ‘raspar’ la tarjeta, por el contrario, es para disfrutar en familia”, comentó Palacios quien señaló que las personas que visitan este lugar gastaban su cupo, el cual algunas veces no alcanzaba para visitar los más de 20 parques del lugar, cuyas entradas oscilan entre los 100 y 150 dólares por personas. Esto sin sumar los gastos de alojamiento, alimentación y transporte.