La mejor manera de limpiar el aceite que nos ha caído al suelo es espolvoreando harina encima, hasta que la mancha quede completamente cubierta y el aceite no consiga absorber tosa la harina.
Deja actuar un par de minutos para que la harina actúe absorbiendo todo el aceite posible . Seguidamente barre los restos y friega como harías normalmente. Te sorprenderá el resultado. Sencillo, verdad?