Las barricadas volvieron. Ayer, las principales avenidas de la ciudad amanecieron cerradas con escombros, alambres y otros elementos que impedían el paso de vehículos. La Policía regional y la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) removieron los obstáculos de la avenida Andrés Bello y otros puntos de acceso a la ciudad; no obstante, en la mayoría de ellos, los manifestantes volvieron a colocarlos.
El transporte público estuvo de escaso a nulo en la mayor parte de la ciudad, así como en el municipio Campo Elías. Al respecto fue consultado el presidente del Sindicato de Transporte, Benjamín Lara, quien manifestó que dada la imposibilidad de circulación y otros objetos regados sobre la calzada como vidrios, clavos y tachuelas, los profesionales del volante que decidieron prestar el servicio lo hicieron bajo su propio riesgo.
Reiteró que el gremio no está en paro, “sino se está parando solo”, pues a las barreras se suma la falta del combustible (gasoil) que no está llegando a la ciudad.
Santamarías abajo
La mayoría de los establecimientos comerciales permanecieron cerrados, otros bajaron su santamaría llegado el mediodía, dada la poca afluencia de personas en las calles y el temor de que sucediera algún hecho que alterara el orden público y pudiera desencadenar en saqueos u otros daños a la propiedad.
En un recorrido por la avenida Las Américas se pudieron observar decenas de barricadas. A la altura del sector El Campito fueron dispuestos alambres, estructuras de acero y otros objetos para impedir el paso de vehículos.
Asimismo sucedió en la entrada del sector Los Sauzales, donde hicieron uso de las rejillas del alcantarillado. Metros abajo, en las residencias Los Samanes, un grupo de vecinos colocó alambres y otros obstáculos, seguido de una segunda barricada para la cual hicieron uso de las paradas públicas que existían en la zona y piedras de una construcción cercana.
A la altura de las residencias Independencia y Monseñor Chacón las barreras fueron reforzadas con troncos de árboles, estructuras de concreto y alambres. En la esquina que enlaza con el viaducto Sucre, un grupo de manifestantes cerró ambos canales de la avenida y el acceso al sector Santa Bárbara.
Otras arterias viales como las avenidas Los Próceres y Ezio Valeri tampoco fueron transitables, incluyendo conjuntos residenciales como La Floresta, La Horqueta y La Linda.
El acceso a la avenida 16 de Septiembre estuvo cerrado por el lado sur, mismo que comunica al sector Pie del Llano con Santa Juana. El centro de la ciudad (avenidas 2, 3, 4 y 5) tuvo cierres intermitentes, al igual que el viaducto Campo Elías. La avenida 8 también fue tomada por los vecinos, funcionarios de la GNB permanecían calles abajo, apoyando un operativo de limpieza por acumulación de desechos sólidos. También habitantes de Santa Juana obstaculizaron las vías de acceso a esa comunidad.
Protección
Manifestantes aseguraron que más que una forma de protesta, la instalación de barricadas es una medida de protección contra grupos armados que en motocicletas arremeten contra las urbanizaciones.