Casi en ruinas, tras considerables pérdidas millonarias tanto en mobiliario como en infraestructura, quedaron las dos discotecas “Pachá” y “Bla Bla”, en Barrio Obrero, luego de que fueran incendiadas por delincuentes motorizados la medianoche de este martes, publica La Nación.
En ambos casos, vecinos de la zona declararon que fue un grupo de motorizados que, luego de romper las puertas, irrumpió en los negocios, donde robaron equipos audiovisuales y botellas de licor, causaron destrozos y luego les prendieron fuego.
William Delgado, propietario de “Pachá”, en la calle 10, entre careras 22 y 23, indicó que un vecino de Barrio Obrero, aproximadamente a la 1:00 de la madrugada, le alertó que las llamas que venían desde su casa podrían haberse originado en su discoteca.
— No estaba seguro si era mi discoteca o la del vecino. Salí de mi casa y como pude llegué. Efectivamente, me sorprendí al ver que no solo era el establecimiento del vecino, sino mi negocio también estaba en llamas. Los bomberos trataban de controlar el fuego en “Bla Bla”, así que tomé los extinguidores que tenía y logré apagar el incendio. Sin embargo, las pérdidas son considerables, todavía no tengo un estimado, pero robaron más de 10 televisores, todo el licor de la barra, dañaron y quemaron el mobiliario casi en su totalidad —, expresó.
Delgado señaló que de no haber llegado a tiempo su negocio hubiera quedado peor, y no solo el daño a la discoteca, sino los estragos que hubiera generado el incendio en toda la manzana.
— La gasolina que regaron en el segundo nivel habría provocado un incendio de grandes proporciones, porque la intención era destruir todo. Gracias a Dios solo las cámaras estaban encendidas, los brakes pasados. Gracias a Dios esto no fue una tragedia mayor, porque al amigo de “Bla Bla” le dejaron el negocio completamente destruido —, precisó.
Quienes lo hicieron –continuó- no son seres racionales, son terroristas, y por eso pido a los cuerpos de seguridad que investiguen hasta sus últimas consecuencias.
— Ya la Fiscalía y el Cicpc estuvieron aquí haciendo experticias; existen videos que aún no he visto, hay muchas versiones y pruebas que tienen los vecinos, que aunque tienen miedo, confío en que las puedan suministrar. Esto le podría pasar a cualquier otro empresario. Que alerten cuando vean algo raro, los tachirenses somos gente de paz, de trabajo —, dijo.
La discoteca de Delgado sufrió daños en un 50 por ciento de su infraestructura. Los 35 empleados que trabajan allí, están desesperados ante la situación de desempleo que ahora enfrentan, sin saber cuánto tiempo llevará la recuperación del negocio.
— Lo más grave de todo es que le hicieron daño a 35 familias, porque conmigo trabajan 35 personas que son sostén de familia, estudiantes universitarios, gente humilde que necesitaba el trabajo. Me han llamado y están muy preocupados, están desesperados —, declaró.
“Como 40 motorizados y un Corsa rojo”
Las mismas escenas de ruinas, angustia e impotencia que se vieron en “Pachá”, se observaron al voltear la esquina, en la carrera 22 frente a la plaza Los Mangos, en “Bla Bla”. Allí el daño fue mayor, aunque los delincuentes que irrumpieron en el local no pudieron saquearlo, sobre todo en lo que respecta a equipos de sonido y video.
El dueño de la discoteca, Fabrizio Fazzolari, se encuentra fuera del país, por lo que se dialogó sobre el hecho con un vocero autorizado que prefirió no identificarse.
— Esto lo tomó por sorpresa, porque es un empresario que tiene entre 15 y 20 años invirtiendo en San Cristóbal, precisamente para fortalecer la economía del estado. Se presume que fue un acto vandálico, según lo que han dicho todos los de la comunidad. Señalan a un grupo de como 40 motorizados, acompañados por un vehículo Corsa rojo, los cuales golpearon la puerta, la partieron, ingresaron a la discoteca e intentaron por supuesto saquearla, pero resulta que el sonido, la iluminación, todo está instalado demasiado alto, no pudieron alcanzarlos, al igual que los televisores, por ende decidieron quemar todo por completo —, señaló.
Dijo que los daños son íntegros, ciento por ciento en pérdidas. Los efectivos del Cuerpo de Bomberos pudieron apagar las llamas, pero aún así el fuego causó estragos, tanto en el mobiliario como en la infraestructura, desde piso a techo, pérdida total.
— El negocio está asegurado, pero en vista de la devaluación y la inflación, sabrá Dios a cuánto asciendan las pérdidas. Y actualmente, luego de este desastre que causaron, son 70 familias que están en juego, 70 personas que trabajaban en la discoteca, que hoy por hoy, lamentablemente, están desempleadas —, precisó.
Miriam Bustos