La madre del detenido narcotraficante mexicano Joaquín “el Chapo” Guzmán, María Consuelo Loera, se deslindó hoy de la carrera delictiva de su hijo y aseguró que “ellos se salen a buscar la vida” como lo mejor creen cuando termina la etapa de crianza.
“Uno los cría y mientras están bajo responsabilidad de uno, uno sabe, ¿verdad? (Cuando) ya no dependen de uno, ellos se salen a buscar la vida”, dijo Loera en una entrevista hecha en México por la cadena Univisión de EE.UU. y reproducida este viernes por medios locales.
“Si ellos hacen bien o hacen mal, una sigue siendo su madre y ellos siguen siendo sus hijos”, aseguró la progenitora del líder del cártel de Sinaloa, conocida por el vecindario como Doña “Chelo”.
En esa entrevista se señala que la mujer, quien está a punto de cumplir 86 años, vive modestamente en su casa en lo alto de la Sierra de Badiraguato, en la localidad de La Tuna, noroeste de México, rodeada de fotografías y otros recuerdos.
El narcotraficante fue detenido el pasado sábado por efectivos de la Armada de México en Mazatlán, Sinaloa (noroeste), y se encuentra preso en el penal federal de alta seguridad de El Altiplano, en el central Estado de México.
“Nada más que él me avise cuando pueda ir y voy a hacer el propósito de ir a verlo”, aseguró la octogenaria madre de “el Chapo”, quien se mueve en silla de ruedas.
La mujer se casó con Emilio Guzmán Bustillo cuando tenía 20 años y tuvo 11 hijos, ocho varones y tres mujeres, de los cuales cinco han muerto ya.
El apodo “el Chapo” le fue puesto al capo del narcotráfico por un tío hermano suyo, debido a su baja estatura y porque Guzmán era regordete de niño.
De acuerdo con los medios mexicanos, estas son las primeras declaraciones de Consuelo Loera en casi 10 años.
En 2005, la mujer habló sobre el arresto de Miguel Ángel “El Mudo” Guzmán Loera, hermano de “el Chapo”, durante la fiesta de 15 años de su hija. EFE