El ser humano, como ente imperfecto, tiende a tener saboteos internos en donde el peso es una excusa para manejar
la vida. Pero, en tiempos de presión y estrés la comida realmente cómo la vemos ¿es una válvula de escape?
Para las personas con problemas de peso la palabra ansiedad está relacionada con la alimentación. Sin embargo, tenemos que entender que lo que sienten los pacientes es hipoglicemia; baja de azúcar.
Así lo manifiesta Doménico Petrarca, médico cirujano y especialista en trastornos de conducta, quien también asegura que, aunque parezca mentira, las últimas investigaciones apuntan a que “comer carbohidratos es importantísimo para evitar la ansiedad como punto de partida”, es decir, que ayudan a bajar el nivel emocional ocasionado por alguna situación inestable, bien sea emocional, personal, laboral, política, entre otras.
A su vez, recomienda al paciente que esté viviendo alguna situación con picos emocionales, ligados al estrés, ingerir porciones de carbohidratos con igual porcentaje de proteínas hasta las 5 de la tarde, y por supuesto comer con hambre.
“Es común que al comer la persona afectada se tranquilice, pero eso queda marcado en el inconsciente y todo lo que produzca ansiedad lo canalizará con la comida, teniendo en la nevera la farmacia para comprar un ansiolítico”, informó.
Enemigo inerte: la fatídica balanza
Para muchas personas la balanza es muy peligrosa, una mezcla de miedo y amor. “Se debe comer cuando se tiene hambre. Las dietas son artificios publicitarios, el peso es más que la balanza, es un factor interno que hay que solucionar, ya que absolutamente todo gira alrededor de el”, comentó.
El especialista, que se ha dedicado a difundir este mensaje masivamente a través de más de 400 conferencias y talleres a nivel nacional e internacional, interpreta este problema con un fácil ejemplo: un kilo representa inconscientemente una tonelada en la persona afectada.
Conscientemente esto es inexplicable pero para la visión distorsionada del paciente es una tragedia que no facilita arreglar problemas complejos.
La comida es una necesidad fisiológica y no puede ser sustituida por nada. Es por ello, que la alimentación variada es determinante para no aumentar de peso, ya que el organismo se estanca al comer siempre lo
mismo. “El sobrepeso es un trastorno psicosocial, la solución del problema es 60% conductual”, indicó el especialista en trastornos de conducta, quien a su vez recalcó que la clave para solucionar el problema es el autoestima.