“Unas 110 reclusas volvieron a la cárcel”, dijo Juan Carlos Huilcamán, comandante de la Comisaría de Carabineros (Policía Militarizada) de Iquique, a medios locales.
Unas 300 internas se fugaron de la penitenciaria, aprovechando la caída de uno de sus muros por el fuerte sismo de 8,2 grados Richter ocurrido el martes por la noche.
El gobierno chileno inició un operativo para recapturarlas. En la búsqueda participó la Policía, Gendarmería (guardia de cárceles) y efectivos militares.
Pero la Policía y personal del Ejército también realizaron tareas de prevención de incidentes ante posibles ataques a tiendas y supermercados que por el momento no ocurrieron en Iquique, agregó Huilcamán.
“Tenemos un balance positivo en términos generales porque no tuvimos mayores incidentes respecto a saqueos. Iquique retoma tímidamente su normalidad”, afirmó el jefe policial.
El terremoto, que fue seguido por un tsunami, causó la muerte de seis personas (cinco hombres y una mujer) en las localidades de Iquique y Alto Hospicio, mientras que 900.000 fueron evacuadas en todo Chile.
La presidenta Michelle Bachelet se encuentra en Iquique para encabezar las tareas de ayuda, luego que en la madrugada decretó zona de catástrofe en las regiones de Arica e Iquique, las más afectadas por el terremoto. AFP