Un pasajero ebrio causó una alarma de secuestro durante un vuelo de Virgin Australia cuando trató de entrar a la cabina de pilotos y fue arrestado el viernes luego de que el avión aterrizara en la isla de Bali, informaron las autoridades.
El aeropuerto fue cerrado durante casi dos horas debido al incidente, lo que obligó a desviar varios vuelos, informó el comandante de la base de la fuerza aérea, coronel Sugiharto Prapto.
El pasajero, de nacionalidad australiana, actuó en forma
Fue detenido por provocar disturbios y los investigadores esperaban a que recuperara su sobriedad antes de interrogarlo.
El jefe de la policía de Bali, Benny Mokalu, dijo a los periodistas que después de que el hombre comenzó a golpear la puerta cerrada, el piloto emitió un código de alerta para los controladores de tráfico aéreo. La tripulación logró controlar al hombre y lo puso en un asiento trasero durante la hora restante del vuelo.
Prapto dijo que el avión fue aparcado al final de la pista de aterrizaje, en caso de que hubiese explosivos o armas. Decenas de soldados rodearon el avión.
“Inmediatamente tomamos las medidas de seguridad adecuadas, con la participación de los soldados, porque la información inicial que nos dieron fue que el avión había sido secuestrado”, dijo Prapto.
Agregó que elementos de la Fuerza Aérea se acercaron al avión y que tomaron al hombre en custodia.
El avión, un Boeing 737-800, transportaba a 137 pasajeros y siete tripulantes en un vuelo que salió de Brisbane, Australia, con destino a Bali, que es uno de los principales destinos de vacaciones para los australianos.
Nadie de los pasajeros o la tripulación resultó herido en el incidente, según la aerolínea. AP