Fuerzas de seguridad detuvieron a un cabecilla del Cártel del Golfo con presencia preponderante en el estado de Tamaulipas, fronterizo con Estados Unidos, quien en su intento por convertirse en jefe de esa organización, desató una oleada de violencia, informó el domingo el gobierno.
Juan Manuel Rodríguez fue capturado este domingo, en compañía de su esposa e hijos, en el opulento municipio de San Pedro Garza García, del estado de Nuevo León (norte), donde se escondía alquilando habitaciones de varios hoteles, reportó en conferencia el comisionado federal de Seguridad, Monte Alejandro Rubido.
Rodríguez intentaba hacerse del mando del Cártel del Golfo tras la detención de uno de sus principales líderes, Mario Armando Ramírez Treviño, en agosto de 2013, pero “no fue reconocido por todas las fracciones” de ese grupo, lo que detonó enfrentamientos al interior de la organización, dijo Rubido.
Con la captura de Ramírez, suman tres cabecillas de ese cártel detenidos, de un total de 12, que el gobierno se propuso arrestar para contrarrestar la violencia, añadió el funcionario.
Rodríguez García (39 años) intentaba controlar el cártel “mediante actos violentos, como la eliminación de aquellos elementos que no eran totalmente afines a sus intereses”, prosiguió Rubido.
El detenido además “fungía como responsable del trasiego de droga, dinero y armas a través de los puentes fronterizos de Tamaulipas”, y presuntamente también “ordenaba los secuestros masivos de indocumentados, a quienes obligaban a trabajar para su grupo o de lo contrario los asesinaba”, puntualizó Rubido.
En agosto de 2010 un grupo de 72 inmigrantes de centro y Suramérica fueron masacrados por Los Zetas (antiguos aliados del cártel del Golfo) en un rancho de San Fernando (Tamaulipas) por negarse a enrolarse en sus filas, según investigaciones oficiales.
Desde inicios de abril se han registrado más de un centenar de asesinatos vinculados con la criminalidad en Tamaulipas -con costas en el Golfo de México- lo que motivó que el gobierno federal reforzara la seguridad en esa demarcación.
Las autoridades atribuyen la escalada de la violencia en Tamaulipas también a la feroz disputa que sostienen desde 2010 los cárteles del Golfo y Los Zetas, además de a las pugnas internas en estos grupos que se desataron tras las recientes capturas de algunos de sus jefes. AFP