Yates de lujo en la cuenca del Río Amazonas serán una opción para suplir la falta de infraestructura de Manaos, la sede amazónica del Mundial 2014, a pesar de las autoridades no esperar un ‘boom’ de turismo a raíz de los precios altos y las distancias de este país continental.
El Gobierno del Estado de Amazonas informó de que unos treinta yates y otros tantos moteles fueron seleccionados en Manaos para recibir a los turistas durante el Mundial que comienza el 12 de junio, porque los 107 hoteles, con 23.000 camas, son insuficientes.
“Con los moteles y los barcos esperamos agregar más de 900 camas disponibles en Manaos”, dijo el presidente de Amazonastur, ente regional de turismo, Oreni Braga, en una entrevista con Efe.
Los yates amarrados en el Río Negro, afluente del Río Amazonas que baña las costas de Manaos, dispuestos para los turistas tendrán camarotes, cocina, piscina y salón comedor.
De acuerdo con Amazonastur, el 80 % de la red hotelera está con capacidad agotada, a un promedio de costo diario equivalente a 174,3 dólares pero se rechazó la idea de poner cruceros turísticos como opción porque la temporada de estos se termina en abril.
En Manaos jugará el 14 de junio Inglaterra e Italia. El día 18 Camerún y Croacia, el 22 Estados Unidos contra Portugal y tres días después Honduras frente a Suiza.
En el mismo sentido unas 400 residencias particulares están siendo registradas para sumarse a la oferta de turismo, cuyos precios diarios varían entre 112,4 y 179,8 dólares.
Destacó que tras el Mundial espera un crecimiento del turismo hacia Manaos.
El presidente de la Asociación Brasileña de Industria de Hoteles en Amazonas, Roberto Bulbol, dijo que unos cuarenta hoteles están con el 90 por ciento de reservas.
Según Bulbol, los hoteles situaos en la jungla y alejados de Manaos, no atrajeron a los hinchas. “La permanencia de los visitantes del Mundial será de tres o cuatro días”, comentó.
El consultor Ribamar Mendez dijo a Efe que los hoteles de selva aumentaron en un 30 por ciento sus precios “sobrevalorando un evento como el Mundial”.
Portugal, por ejemplo, no permanecerá en la ciudad, apenas desembarcará para el partido con Estados Unidos el 22 de junio. “Es por eso que los hinchas no se quedarán mucho más tiempo”, evaluó el consultor en turismo.
Ellen Honorato de Moraes, propietaria del hotel de selva Ariaú Tower, dijo a Efe que no hubo demanda de los turistas de la Copa.
“Esperábamos un 100 % de crecimiento en visitas pero no hubo respuestas. Esperamos apenas a público de Estados Unidos, como todos los años, ajenos al Mundial”, dijo De Moraes.
La empresaria atribuyó la falta de interés en el gran atractivo que significa hospedarse en la selva con servicios cinco estrellas al elevado precio de los pasajes aéreos hacia Manaos y a la “falta de más empeño” en la divulgación. EFE