El presidente, Barack Obama, afirmó este sábado que el gobierno catarí dio a Estados Unidos garantías de seguridad en el marco de la transferencia de los cinco prisioneros afganos de la cárcel de Guantánamo a cambio de la liberación de un soldado estadounidense.
“El gobierno catarí nos ha asegurado que pondrá en práctica medidas para proteger nuestra seguridad nacional”, afirmó Obama, aunque sin dar mayores detalles, en conferencia junto a los padres del sargento Bowe Bergdahl quien estuvo retenido en Afganistán durante cinco años.
Según los talibanes, los cinco prisioneros se llaman Mohamad Fazl, Norulá Nuri, Mohamed Nabi, Jairulá Jairkhwa y Abdul Haq Wasiq, identidades que fueron confirmadas por el Departamento de Estado.
Una fuente talibana en la ciudad paquistaní de Quetta dijo a la AFP que estas cinco personas eran autoridades influyentes del régimen talibán cuando Estados Unidos empezó a invadir Afganistán en 2001, en respuesta a los atentados del 11 de septiembre de ese año.
Durante la rueda de prensa, el padre del soldado estadounidense, Bob Berghal, dijo que no podía “expresar” sus emociones después de que Obama lo llamara para informarle de la liberación.
El hombre contó que su hijo tenía dificultades para hablar inglés después de haber pasado tanto tiempo sin practicarlo.
“En nombre de Dios, el más clemente, el más misericordioso”, dijo Bob Bergdahl en árabe. “Soy tu padre, Bowe”, añadió en inglés luego de haber pronunciado las mismas palabras en pashto desde la tarima instalada en el jardín de las rosas de la Casa Blanca.
Obama dijo que estaba orgulloso de las fuerzas estadounidenses en Afganistán que lograron recuperar a su hijo y de los diplomáticos que ayudaron en la negociación para que fuera liberado.
“El sargento Bergdahl se perdió cumpleaños, días festivos y momentos simples con su familia y amigos que todos nosotros asumimos como normales”, dijo Obama.
“Pero mientras Bowe estuvo lejos, nunca nos olvidamos de él. Sus padres pensaron en él y rezaron por él cada día”, añadió.AFP