El sol lanzó dos nuevas llamaradas de gran intensidad y se espera que una eyección de masa coronal alcance la Tierra, lo cual provocará tormentas geomagnéticas en altas latitudes.
El satélite SOHO (Solar and Heliospheric Observatory) de la NASA, captó las erupciones solares, la primera clase X2.2., y una segunda X1.5, ocurridas la víspera.
“Las llamaradas solares son explosiones de gran alcance de radiación”, indicó Karen Fox, del Centro de Predicción de Clima Espacial de la Nasa.
“Las radiaciones nocivas de una llamarada no pueden pasar a través de la atmósfera de la Tierra para afectar físicamente a los seres humanos sobre el terreno, pero cuando son lo suficientemente intensas, pueden perturbar las señales de GPS y las comunicaciones”, señaló.
En lo que va de año se detectaron siete fenómenos de gran magnitud, el de mayor envergadura en febrero pasado.
