Un extraño suceso ha convertido este vídeo en viral. La niña, de tan solo tres años, había fallecido, según los médicos del centros hospitalario Zamboanga del Sur, Filipinas, el sábado a causa de una fiebre extremadamente alta. El domingo se llevó a cabo su funeral y fue entonces cuando sus familiares escucharon que la pequeña se movía en el interior del ataúd, publica que.es.