Intensas lluvias y aludes de tierra durante la semana pasada dejaron por lo menos 45 muertos y 21 desaparecidos en el sur de China, informaron el ministerio de asuntos civiles y una funcionaria.
El sur de la China se preparaba además para la inminente llegada del ojo del tifón Rammasun alrededor del mediodía del viernes, con vientos huracanados que se anticipa superarán los 140 kilómetros (90 millas) por hora. El tifón ha dejado al menos 40 muertos en Filipinas, donde el miércoles arrancó árboles de raíz y derribó postes del tendido eléctrico.
Un deslizamiento arrojó piedras y tierra sobre un camión y cuatro automóviles en una carretera el jueves por la tarde en la provincia de Sichuan, donde dejó 11 muertos y 19 heridos, según una funcionaria del condado de Maoxian, que solo dio su apellido, Li.
El ministerio de asuntos civiles dijo en una declaración que las fuertes lluvias, inundaciones y aludes en la última semana han dejado 34 muertos y 21 desaparecidos en siete provincias del sur. La mayoría de las víctimas se registró en las provincias de Guizhou y Hunan.
El ministerio agregó que casi 9.300 casas se han derrumbado bajo las lluvias fuertes y otras 63.000 han sufrido daños. Las lluvias también afectaron 384.000 hectáreas de cultivos y han causado pérdidas económicas directas por 840 millones de dólares.
La televisión estatal china mostró el avance de las aguas en el pueblo turístico de Fenghuang, en la provincia de Hunan.
Las lluvias llegaron el miércoles por la noche a la capital china e inundaron algunas calles. AP