Expuso que los constructores venezolanos han sido opacados y rezagados en función de darle los contratos a los chinos y a los rusos; y que en la actualidad han tenido que construir en las islas de El Caribe, los países vecinos y Centro América. “Hay una discriminación muy clara contra los constructores venezolanos, lo que están pidiendo son garantías mínimas”, dijo.
A su juicio, hoy en día el mercado inmobiliario venezolano es prácticamente cero y se le cercenó la posibilidad al venezolano de tener una vivienda a través del arrendamiento. “Hoy se habla de una reforma de la Ley de Arrendamiento en boca del propio ministro de Vivienda pero empiezan a aparecer las partes ideológicas que hacen muy difícil arreglar la normativa”, resaltó.
Recordó que gracias a los acuerdos entre el Gobierno y la cámara se logró que la Ley de Arrendamiento Comercial arrojara resultados positivos después de dos meses de su promulgación.
En entrevista a Unión Radio lamentó que, según cifras oficiales, hasta el momento de la meta de la Misión Vivienda de 400.000 viviendas se hayan construido 50.000.