“Ir a una carnicería, es gastar más de mil bolívares en tres bolsitas. La carne está muy cara”, manifestó Alexandra Villanueva. eltiempo.com.ve / Marianela Guariguata
El incremento permanente de la carne de res ha afectado el bolsillo de los consumidores. Muchos han optado por comprar menos, lo que ha generado una baja en las ventas de los comercios.
Villanueva, procedente de Píritu, se encontraba comprando un kilo de carne molida de primera, un kilo de solomo, uno de lomito y un pollo. Por estos productos debió cancelar Bs 1.420.
“Esto es lo que gasto para medio comer en dos semanas. Debo estirar la carne y alternar con algo de pescado, pasta -si tengo- y enlatados que también están caros. De muy mala manera, el venezolano aprendió a racionarse”, dijo.
Otra vecina, de nombre Anaís Sánchez, indicó que “antes compraba más. Tengo tres hijos que alimentar. Compramos un poco más reducido y sin embargo, en cada quincena, gasto más de 1.500 bolívares”.
Eritza Medina, quien se encontraba en otro establecimiento, agregó que semanalmente se encuentra con una sorpresa en el precio de las carnicerías.
“Una semana la carne tiene un precio, vas a los días y hay un incremento. Ya no sabemos a qué atenernos, pues también es raro cuando se consigue el producto.”
Manifestó que antes, hace unos 8 meses, disponía de 500 bolívares para llenar su refrigerador, “pero ahora, con mil bolívares no compro nada de carne. Los precios son inestables y uno debe salir con más de 2 mil bolívares en el bolsillo.”
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