El presidente Juan Manuel Santos dijo el jueves que está de acuerdo con la utilización medicinal y terapéutica de la marihuana, un proyecto que fue enviado al Congreso por un senador de la coalición de gobierno.
“Sea esta la oportunidad senador tocayo Juan Manuel Galán para decirle que vemos con buenos ojos su iniciativa sobre la utilización medicinal y terapéutica de la marihuana”, aseguró el mandatario durante el Foro Política de Drogas en un hotel del norte de Bogotá.
Esa iniciativa, añadió, “la entendemos como una medida práctica, compasiva, para reducir el dolor (y la) ansiedad de los pacientes con enfermedades terminales, pero también como una forma de comenzar a sacar de las manos de los criminales el ser intermediarios entre el paciente y una sustancia que les va a permitir aliviar su sufrimiento”.
La iniciativa está siendo impulsada en el Legislativo por Galán, senador del Partido Liberal e hijo del dirigente político y candidato presidencial Luis Carlos Galán, asesinado 25 años atrás por el narcotráfico.
Galán expresó por teléfono a The Associated Press su satisfacción por el apoyo público de Santos a la iniciativa.
Con el aval del jefe de Estado, recalcó Galán, “el respaldo en el Congreso va a crecer muchísimo y la meta que yo me he puesto es que en diciembre podamos tenerlo aprobado en el Senado. De ahí pasaría a la Cámara”. Agregó que el objetivo es que “antes de junio de 2015 esté aprobado”.
Países como Argentina, Brasil y Chile, dijo Galán, ya han empezado a avanzar con propuestas similares a la suya. Advirtió que, en todo caso, su iniciativa nada tiene que ver con la legalización de las drogas en general.
En el mismo evento en el hotel del norte bogotano, Santos aseveró que la lucha mundial contra las drogas ha fracasado.
“Hemos gastado billones de dólares en una guerra inefectiva que nada más en México ha dejado más de 60.000 muertos en los últimos seis años, millones que deberían haberse invertido en hospitales, colegios, viviendas para los más pobres y generación de empleo”, sostuvo el mandatario.
Para el jefe Estado, si bien los grandes carteles de la droga fueron desmantelados, el negocio sigue “vivito y coleando”.
Santos sostuvo que “los éxitos relativos de Colombia han hecho que la espiral de violencia y corrupción asociada al problema de las drogas ilícitas se traslade a otros países” y enfatizó la necesidad de “un nuevo enfoque para enfrentar el problema de las drogas”.
Más que una guerra, insistió, la lucha contra las drogas debe incluir “medidas inteligentes, bien diseñadas y bien ejecutadas, centradas en la gente y que, por supuesto, produzcan mejores resultados que los que hemos alcanzado hasta ahora”.
El general Ricardo Restrepo, director antinarcóticos de Colombia, explicó telefónicamente a AP que actualmente en Colombia hay entre 380 y 400 hectáreas sembradas con marihuana, principalmente en el departamento del Cauca, al suroeste del país, y en la Sierra Nevada de Santa Marta, en la costa Caribe. En Cauca la producción la manejan principalmente las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y en la Sierra Nevada la delincuencia común y bandas criminales.
Para el oficial, la producción de marihuana en el país está estable.
El año pasado fueron decomisadas 360 toneladas de la hierba y este año sus hombres se han incautado de 180 toneladas. Un kilogramo de marihuana en el país cuesta, según Restrepo, entre 424 y 530 dólares.
El último informe de Naciones Unidas sobre drogas arrojó que Colombia no logró reducir las 48.000 hectáreas sembradas con hoja de coca pero sí disminuyó la producción de cocaína.
El país continúa siendo el segundo productor mundial de hoja de coca, materia prima de la cocaína, después de Perú que, según Naciones Unidas, registró el año pasado 49.000 hectáreas cultivadas.
De acuerdo con la Naciones Unidas, en 2013 Colombia registró una caída en la oferta potencial de cocaína: de 488 toneladas métricas en promedio en 2009 a 290 toneladas métricas el año anterior.
AP