Autoridades impusieron un toque de queda a partir de la medianoche por segunda noche consecutiva en un tenso suburbio de St. Louis, Estados Unidos, donde un adolescente afrodescendiente murió la semana pasada tras ser baleado por un policía. Reuters
Además cerraron una calle para el tráfico de vehículos incluso antes del atardecer. La medida se produce mientras varios manifestantes ya se habían comenzado a reunir en la avenida West Florissant en Ferguson, el sitio de las protestas, la violencia y los saqueos desde que Michael Brown, de 18 años, fue muerto a disparos el 9 de agosto.
Los funcionarios planean decidir diariamente si extender el toque de queda impuesto el sábado por la noche por el Gobernador de Misuri, Jay Nixon, en un esfuerzo por aplacar las protestas y los saqueos, dijo el portavoz de la patrulla de caminos Justin Wheetley.
El fiscal general de Estados Unidos, Eric Holder, ordenó el más temprano el domingo una autopsia federal al cuerpo de un joven que falleció baleado por un oficial de policía en Ferguson, Misuri, a fin de garantizar a la familia y la comunidad que se investigará a fondo una muerte que ha desatado días de protestas raciales.
Brown, un joven afrodescendiente, recibió disparos por parte del oficial de policía blanco Darren Wilson. El departamento de policía en el suburbio de St. Louis ha sido el centro de fuertes críticas por la muerte de un hombre desarmado y por su manejo de las repercusiones del caso.
Siete manifestantes fueron arrestados el domingo después de la imposición del toque de queda la noche del sábado.
La policía usó bombas de humo y gases lacrimógenos para dispersar a la multitud, dijo un portavoz de la patrulla de caminos de Misuri.
El capitán de la patrulla de caminos, Ron Johnson, a quien el gobernador le confió la misión de restaurar el orden, dijo a cientos de personas congregadas en una iglesia local para una protesta que se comprometía a proteger su derecho a protestar.
Holder ordenó la autopsia federal, además de la que habían llevado a cabo médicos forenses estatales, “debido a las extraordinarias circunstancias que intervienen en este caso y a petición de la familia Brown”, dijo el portavoz del Departamento de Justicia, Brian Fallon.
La familia prevé que un patólogo también examine de manera independiente el cuerpo del joven, dijo un portavoz de los familiares.
Los enfrentamientos de la mañana se produjeron cuando manifestantes permanecieron en las calles tras la entrada en rigor del toque de queda a la medianoche. Las siete personas arrestadas no se dispersaron, dijo la policía.
Una persona resultó gravemente herida tras un impacto de bala durante la noche. No estuvo claro por qué y el responsable seguía en libertad, dijo la policía. Johnson dijo que la policía no logró identificar a la víctima, que según dijo no fue atacada por la policía.
Johnson dijo también que una persona disparó a un auto policial que transitaba por la zona, pero que no fue arrestada.
Las bombas de humo y lacrimógenas dispersaron a la multitud.
Nixon dijo que pese a los enfrentamientos, el toque de queda fue exitoso.
También criticó al departamento de policía de Ferguson por difundir el viernes un video que supuestamente muestra a Brown participando de un robo en una tienda poco antes de que fuera asesinado. La policía ha sostenido que el oficial que disparó a Brown no tenía idea de que era sospechoso de robo.
El presidente Barack Obama ha estado recibiendo información sobre el caso pese a estar de vacaciones en Martha’s Vineyard.
La muerte de Brown ha sido descrita de forma distinta por la policía y por el amigo que lo acompañaba la noche de su muerte.
La policía dice que luego de que Wilson pidió a Brown que saliera de la calle, Brown entró a la patrulla policial y luchó con Wilson por el revolver del oficial. Luego, Wilson disparó a Brown varias veces.
En tanto, el amigo de Brown, Dorian Johnson de 22 años, y al menos otro testigo, han asegurado que el oficial estiró el brazo por la ventana del auto para alcanzar a Brown y que el joven intentaba soltarse cuando recibió los disparos. Brown alzó sus manos en señal de rendición pero el oficial salió de su patrulla y le disparó varias veces, dijeron.