La diputada a la Asamblea Nacional por Proyecto Venezuela (Prove), Deyalitza Aray enfatizó que el nuevo sistema biométrico que quiere implementar el Gobierno Nacional es una manipulación, un chantaje y una burla para los venezolanos que debe ser rechazado de forma categórica. Prensa Prove
Sencillamente inaceptable que este gobierno, después que destruye el aparato productivo nacional, se endeuda en importaciones que luego deja vencer y podrir en los puertos del país, pretenda no solo tener sometido a los venezolanos a las indignantes colas para comprar alimentos ahora pretenda “cubanizar la compra con un sistema que lo único que busca es controlar lo que comes y cuánto comes”, recalcó Aray.
Más de 2.500 millones de dólares fue la pérdida en el caso de Pdval y 130 mil toneladas de comida, 5.000 mil millones de dólares fueron asignados en el 2013 para las 760 mil toneladas de alimentos que acabarían con la escasez y el resultado fue 12.500 contenedores abandonados con mercancía vencida y dañada, por eso nos indigna –dijo la parlamentaria- que el gobierno anuncie un sistema de control.
Aseguró la diputada por Proyecto Venezuela que el Ejecutivo nacional ha realizado contratos que pone al descubierto el negocio que tienen a costa de la comida de los venezolanos, los operativos que hacen con Mercal son solo por la imposibilidad de surtir a su red de bodegas porque no tienen mercancía, aunado a una gran carencia de gas doméstico en el país con la mayor reserva del mundo.
“Ahora el gobierno quiere vender este sistema como la varita mágica para resolver todos los problemas de escasez y desabastecimiento, el plan seguro para acabar con el llamado Bachaqueo que el propio gobierno convirtió en negocio”, manifestó.
Rechazamos categóricamente este sistema tal como rechazamos que se siga sometiendo a los venezolanos a esa grosera manipulación de sus necesidades básicas y así lo denunciamos, al implantar un falso sistema para controlar tu consumo, tu independencia, tu libertad de acceder a lo que quieras y cuándo quieras, solamente es utilizada nuestra riqueza para sostener un proyecto partidista, concluyó Deyalitza Aray.