En días pasados desde Primero Justicia en compañía de representantes de distintos sectores de la sociedad como estudiantes, dirigentes populares, líderes vecinales, comunicadores sociales le planteamos al país, cual en nuestro criterio, es el camino para superar este injusto momento de tanto sufrimiento que vivimos los venezolanos a causa de un Gobierno que se empeña en profundizar sus errores y que no entiende que el problema es que el modelo es inviable y que podrán cambiar o enroscar cada mes a los ministros, crear súper ministerios, etc y el drama será el mismo porque, mientras no haya producción su mayor esfuerzo será distribuir la escasez y podrán crear todos los mecanismos de control (captahuella, chip, piedra papel o tijera, pare o nones, póngale la cola al burro, etc, etc, etc ) y siempre seguirá nuestro pueblo viviendo sumergido en una profunda inflación y desabastecimiento.
Frente a esta irrefutable realidad llamamos al pueblo de Venezuela, en primer lugar, a hacer sentir su voz y descontento contra este modelo fallido que el Gobierno quiere continuar imponiendo, símbolo de este modelo humillante y fracasado es la tarjeta de racionamiento que quieren implantar imitando el modelo cubano de pobreza y sometimiento.
Emplazamos al Gobierno a que tome sin miedo las medidas que lleven a que la economía venezolana resucite y sea capaz de generar progreso, bienestar y oportunidades para todos por igual. La meta de un buen gobierno no debe ser manejar la escasez y la miseria que hoy vivimos. El objetivo es producir más, generar riqueza para todos y más oportunidades.
En segundo lugar, es que la solución para nuestro país es cambiar el modelo que nos sume en la miseria. En este sentido, queremos señalar con claridad y con fuerza a todo el país que existe un camino corto y seguro para lograr el cambio en Venezuela, se trata de capitalizar ese 80% de venezolanos inconformes con el rumbo del país, de convencerlos con nuevas propuestas de seguridad, control sobre la corrupción, crecimiento económico y justicia social.
El primer paso hacia ese ansiado cambio es una nueva Asamblea Nacional la cual no sea controlada por una mayoría oficialista, imaginemos una nueva Asamblea donde la Unidad Democrática sea mayoría y donde podamos aprobar la seguridad social para todos, donde podamos permitir la reelección presidencial por un solo periodo, una Asamblea donde la aprobación de la Ley del Primer empleo sea prioridad y no un debate sobre la situación de un país que está a miles de kilómetros de nuestra patria.
Imaginemos una Venezuela donde la Asamblea pueda interpelar al ministro de sanidad y preguntarle dónde están las medicinas para nuestro pueblo o darle un voto de censura al ministro de vivienda porque la Misión Vivienda está paralizada, pensemos en una Asamblea Nacional donde haya respeto, diálogo y no violencia y golpes. Donde se debata y se apruebe la agenda del pueblo y no la agenda de quienes están en el poder. En esta nueva Asamblea Nacional se sembrará y germinará el verdadero cambio para el país.
Primero Justicia llama a un desafío concreto y claro: convertir en menos de un año a la Asamblea Nacional en el lugar donde se haga posible el cambio que quiere ya Venezuela.
En Primero Justicia queremos dejar claro que la elección de la Asamblea Nacional el 2015 no es un fin en sí mismo. No es un evento de políticos para políticos; todo lo contrario, en eso han convertido al parlamento actual y nosotros debemos liberarlo y darle vida a través de una mayoría contundente. Como en el año 2010, debemos lograr una plataforma perfecta. Por eso pedimos ayuda a nuestro pueblo para que desde este momento nos ayude a escoger con primarias y con acuerdos dicha plataforma.
Diputado AN por Petare
@calderajuan