Australia elevó este viernes de media a alta el nivel de amenaza terrorista por primera vez en la última década, ante las preocupaciones que provocan los australianos yihadistas que regresan tras combatir en Oriente Medio.
La alerta alta significa que “un ataque terrorista es probable”.
“Hay gente con la intención y la capacidad como para organizar y realizar ataques aquí en Australia”, dijo el primer ministro Tony Abbott en una conferencia de prensa.
La última vez que Canberra lanzó una alerta alta fue en 2003.
Esta decisión no se apoya en “un conocimiento de un proyecto de atentado específico, sino en una serie de elementos que señalan la probabilidad creciente de un atentado terrorista en Australia”, agregó el primer ministro en un comunicado también firmado por el procurador general George Brandis.
“Los servicios de seguridad e información se alarman del número creciente de australianos que integran grupos terroristas como el Estado Islámico (EI), el Frente al Nosra y Al Qaida. La amenaza que ellos representan aumentó desde hace más de un año”, subrayan.
Según Canberra, hasta unos 60 australianos combaten en Irak y Siria, y otro centenar brinda desde Australia un apoyo activo a los movimientos sunitas radicales. AFP