El Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) venezolano informó que el comisario Iván Simonovis, que ayer recibió una medida humanitaria de casa por cárcel hasta que se recupere de sus múltiples dolencias, tendrá que presentar un informe sobre su estado de salud cada tres meses.
A través de un comunicado, el TSJ indicó que el comisario, preso desde 2004 y condenado a 30 años por 2 de las 19 muertes registradas durante el golpe de Estado de 2002 contra Hugo Chávez, “deberá presentar cada tres meses informe actualizado de su estado de salud”.
Recordó que Simonovis una vez que se recupere regresará a su celda en el penal militar de Ramo Verde a las afueras de Caracas y que mientras se encuentre en su domicilio no podrá hacer declaraciones a los medios de comunicación, utilizar las redes sociales ni participar en actos de proselitismo político.
“De igual forma se le prohíbe la salida del país y deberá solicitar autorización al Tribunal para su traslado a centros de salud si así se requiere”, continúa el comunicado.
“El incumplimiento de alguna de estas condiciones acarreará la revocatoria de la medida”, advirtió.
El TSJ aseguró que la medida otorgada a Simonovis fue concedida por una solicitud del Ministerio Público “de acuerdo a los informes médicos forenses que arrojaron las diferentes patologías del penado, las cuales han conducido a un grave deterioro de su salud”.
Según el abogado de Simonovis, José Luis Tamayo, su defendido sufre de 19 patologías distintas y su recuperación “puede llevar mucho tiempo”.
Afirmó que esta medida humanitaria es “parcial” ya que el comisario estará constantemente vigilado por miembros del Servicio Bolivariano de Inteligencia (Sebin)
Simonovis y su eventual salida por razones humanitarias de prisión era desde hace tiempo motivo de disputa entre la oposición, que lo considera un “preso político”, y el Gobierno venezolano, que no olvida que el comisario fue sentenciado por dos de las 19 muertes registradas en el golpe de 2002. EFE