El gobierno argentino intimó este lunes al Bank of New York (BoNY) a devolverle 539 millones de dólares que depositó para pagar bonos de su deuda y que permanecen bloqueados por orden de la justicia de Estados Unidos debido a un litigio que el país mantiene con fondos especulativos.
“La República Argentina ha intimado al BoNY Mellon a que se preste a transferir y entregar todos los bienes y fondos que actualmente están bajo su control”, indicó el gobierno en un aviso pago publicado en los diarios de este lunes.
El anuncio fue realizado en vísperas del discurso de la presidenta Cristina Kirchner ante la Asamblea General de las Naciones Unidas, donde denunciará a los fondos especulativos como desestabilizadores del sistema financiero internacional.
Kirchner dijo haber logrado para su cruzada el respaldo del papa Francisco, severo crítico de la usura financiera, al cabo de una audiencia que mantuvo el sábado en El Vaticano.
La intimación al BoNY incluye un pedido a que renuncie a su condición de agente fiduciario, es decir el pagador de la deuda argentina en Estados Unidos, pero el banco ha señalado que debe obedecer la orden judicial de mantener congelado el dinero depositado por el gobierno argentino.
El juez neoyorquino Thomas Griesa dispuso el cerrojo sobre los 539 millones de dólares, lo que llevó al país a caer en un “default selectivo” el 30 de julio pasado, en represalia por no acatar Argentina su orden de pagarle el 100% de una deuda por 1.330 millones de dólares a fondos que en la jerga financiera se conoce como “buitres”.
Argentina argumenta que el 93% de sus acreedores aceptó una reestructuración de deuda en 2005 y 2010, con quitas de capital de 45% a 70% pero con tentadores dividendos, y que la oferta también debe ser aceptada por los fondos litigantes.
El Congreso argentino acaba de aprobar una ley que autoriza al gobierno a trasladar de Nueva York a Buenos Aires la sede de pago para mantener la regularidad de los pagos.
Kirchner se reúne este lunes en Nueva York con el multimillonario financista George Soros, quien le presentará un plan para salir del “default selectivo”, situación en la que se interesa por haber quedado también su dinero atrapado en el bloqueo judicial neoyorquino. AFP