El diputado por el estado Táchira y dirigente socialcristiano Homero Ruiz, acudió hasta el Palacio de Miraflores, con la finalidad de consignar ante el despacho del Presidente de la República, un plan de acción que permita minimizar el contrabando, elevando la calidad de vida de los habitantes de la frontera. NP
Según lo manifestado por el parlamentario tachirense, desde el Gobierno Nacional deben implementarse una serie de medidas que ataquen con mucha fortaleza una serie de problemáticas.
“Hoy hemos acudido ante el despacho del Presidente con las mejores intenciones de colaborar y de buscarle una salida real al problema del contrabando y el desabastecimiento. Desde Copei estamos presentando un plan de acción realizable, viable, que debe ser discutido por todas las partes afectadas, es decir, la sociedad y el Estado”, manifestó
“Si queremos acabar de manera real y sincera con el contrabando, debemos empezar por solucionar una serie de situaciones que lo promueven. Es necesario que la calidad de vida del ciudadano de la frontera mejore, y esto pasa por el hecho de garantizar la seguridad personal de nuestros ciudadanos, fomentar la creación de nuevos puestos de empleo y sobre todo lograr que los servicios públicos en la zona sean de calidad”, agregó Ruiz.
A juicio de Ruiz, el problema del contrabando no se trata solamente de un negocio de grandes mafias.
“El contrabando en la frontera no es realizado exclusivamente por las grandes mafias criminales. Hoy en día el contrabando se ha convertido en un medio de vida para más de 20.000 familias de la zona, esto como consecuencia de la inexistencia de posibilidades reales de salir adelante para la gente. El desempleo en la frontera es muy alto y en tal sentido el gobierno debe generar las condiciones jurídicas y económicas necesarias para fomentar el empleo en la zona, ya que la única forma de sacar a la gente del contrabando es garantizándole un puesto de trabajo estable y digno mediante el cual puedan llevar el sustento a sus hogares”.
Finalizó el diputado Homero Ruiz asegurando que si se logra mejorar el entorno social de la frontera, se minimizará el contrabando, “si logramos que en la frontera haya servicios públicos de calidad y que haya empresas productivas que oferten suficientes puestos de trabajo, disminuirá considerablemente el contrabando y a la vez se reactivará la economía fronteriza”.