Jaime Carmelo Hernández Rodríguez (43), fue asesinado mientras se dirigía a la finca de su propiedad que lleva por nombre El Roble y está ubicada en los alrededores de la Carretera Nacional Camatagua–Barbacoa, municipio Urdaneta del estado Aragua.
Según relataron los familiares a las afueras de la morgue de Caña de Azúcar, presumen que sin él darse cuenta unos sujetos venían persiguiéndolo en un carro para arrebatarle la moto.
Indicaron que el infortunado entró a la hacienda, cerró la tranca con candado e ingresó posteriormente a la vivienda. Minutos después se soltó una yegua y salió a amarrarla. Su pequeño hijo de dos años se fue tras él. En ese mismo momento un vehículo con tres sujetos se estacionó al frente de la entrada, uno de ellos desenfundó y accionó el arma.
Patricia López, sobrina del occiso, agregó que “solo se oyeron los disparos, cuando llegamos al lugar estaba tirado en el piso y el niño sangraba”. De inmediato trasladaron al pequeño al nosocomio de San Juan de los Morros, luego fue remitió al Hospital Central de Maracay. Se conoció que el niño era el menor de los cinco hijos que deja huérfanos Hernández. El infante ya está fuera de peligro.
Una comisión del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc) realizó las experticias en el lugar de los hechos. Sabuesos informaron que murió de múltiples impactos de bala.
Vía El Periodiquito