Julián Chirinos salió de su vivienda en el callejón El Barroso, sector Santa Clara, en Cabimas. Debía comprar algunas verduras para aliñar la comida y cobrar los premios del dinero que presta. Eran las 4.00 de la tarde del pasado lunes cuando al retornar consiguió el cadáver de su mujer en el suelo de la habitación principal con una herida de bala en la cabeza. laverdad.com / Crisbelis María Salas
A Anagerly Primera Nava Pirona, de 18 años, la asesinaron presuntamente para robarle de la residencia 50 mil bolívares que su esposo había cobrado horas antes por el empeño de la Tarjeta Electrónica de Alimentación (TEA).
Chirinos quiso salvar a su mujer, la trasladó hasta el Hospital de Cabimas, pero ingresó sin signos vitales. Inmediatamente le avisó a sus familiares y a la Policía.
Los vecinos no escucharon ninguna detonación. Tampoco vieron a nadie entrar ni salir de la vivienda. Sobre el hecho se manejan varias versiones. La primera es el robo y la segunda es un presunto suicidio, aunque familiares aseguran que dentro de la vivienda no había armas de fuego y la víctima nunca había dado muestra de atentar contra su vida. El dinero que guardaba Anagerly no estaba.
Juan Nava, tío de Anagerly, dijo que era una muchacha tranquila, muy callada y siempre se la mantenía arregladita. No quiere ni imaginarse qué pudo pasar. Espera que la Policía aclare todo.