La jornada de comicios generales en Bolivia, en la que se elegirá al presidente y vicepresidente y se renovará el Congreso para el periodo 2015-2020, comenzó con la apertura de las mesas electorales donde casi cinco millones de bolivianos podrán sufragar hoy.
Las 27.463 mesas para la votación repartidas en 4.445 recintos electorales en todo el país abrieron a las 8.00 hora local (12.00 GMT) y funcionarán ocho horas ininterrumpidas hasta las 16:00 (20:00 GMT), cuando se prevé el cierre de los colegios.
En total, 5.971.152 bolivianos han sido habilitados para votar en unas elecciones en las que concurren cinco candidaturas, entre ellas la del presidente, Evo Morales, favorito para la reelección para un tercer mandato hasta 2020.
Contra Morales compiten por la silla presidencial el empresario Samuel Doria Medina, el expresidente Jorge Quiroga (2001-2002), el exalcalde de La Paz Juan del Granado y el indígena Fernando Vargas.
Más de 50.000 policías y militares garantizarán el desarrollo normal de los comicios en una jornada con severas y tradicionales restricciones que impiden viajes por el territorio nacional, la circulación de vehículos sin autorización expresa, el consumo y venta de alcohol y los espectáculos públicos.
En el acto oficial de apertura de la jornada, la presidenta del Tribunal Supremo Electoral (TSE), Wilma Velasco, llamó a los bolivianos a acudir con “civismo” a las urnas.
“Mantener la vida democrática, la convivencia democrática y el respeto por la opinión del otro hoy asume la forma de voto y esto es algo que quienes buscan representarnos no pueden olvidar”, añadió.
Velasco también destacó la votación de los bolivianos residentes en el exterior, que podrán elegir a presidente y vicepresidente.
El TSE ha habilitado a 272.058 personas residentes en 33 países, la mayoría en Argentina, España y Brasil.
En las 67 ciudades del exterior donde podrán votar los emigrantes bolivianos se instalarán 1.200 mesas electorales administradas por 7.200 jurados, según datos proporcionados por el órgano electoral.
Las primeras mesas electorales fueron las de Japón, Corea del Sur, China e India, debido a la diferencia horaria.
La última jornada de reflexión antes de acudir a las urnas en Bolivia se desarrolló con tranquilidad hasta última hora de la tarde del sábado, cuando en las redes sociales se armó revuelo por el pirateo de la cuenta oficial en Twitter de la televisión estatal.
Los piratas informáticos publicaron que el presidente Morales había sufrido un atentado y se encontraba en estado grave, por lo que se habían suspendido las elecciones y poco después tuitearon que Morales había muerto.
Esta información fue negada de inmediato por el propio Morales, quien desde su feudo político y sindical del Chapare (centro), declaró a la televisión estatal que se encontraba perfectamente y acusó a la oposición de estar detrás de este montaje.
EFE