El huracán Gonzalo impactó directamente con destructiva fuerza al pequeño archipiélago turístico de las Bermudas la noche del viernes, lanzando lluvias y potentes vientos que dejaron a decenas de miles de personas a oscuras. AFP
El ciclón tocó tierra alrededor de las 00H30 GMT del sábado, con vientos de 175 km por hora y ráfagas más fuertes, informó el Centro Nacional de Huracanes (NHC), ubicado en Miami (sureste de Estados Unidos).
Hacia las 05H00 GMT, el huracán ya comenzaba a alejarse y se ubicaba a 112 km al noreste de Bermudas y se alejaba de la isla, según un nuevo boletín del NHC.
“El peligroso huracán Gonzalo sigue golpeando Bermudas con poderosas ráfagas de vientos huracanados”, advirtió.
Gonzalo es un huracán de categoría dos de las cinco de la escala de Saffir-Simpson y a partir de este sábado se desinflará rápidamente cuando alcance aguas más frías, pronosticó el NHC.
Luego del breve respiro del vendaval que brindó el paso del ojo del huracán, “los vientos destructivos y las inundaciones costeras volvieron a aparecer”, señaló.
Hasta que empiece a amainar este sábado, Gonzalo seguirá provocando vientos, oleaje y lluvias, que podrían acumular entre 8 y 15 cm (por m2), sobre el territorio británico.
Más de 30.000 de los 36.000 clientes que la compañía eléctrica Belco tiene en el archipiélago se quedaron sin luz, reportó el diario the Royal Gazette.
Algunos habitantes reportaron la calma cuando el ojo del huracán llegó.
“Definitivamente estamos en el ojo, está completamente silencioso”, dijo Katie Titterton en un mensaje de texto desde un apartamento en Grape Bay, en el centro de las Bermudas.
“Esta totalmente oscuro afuera. Puedo ver una palmera caída, pero eso es todo”, agregó.
Antes de la llegada de Gonzalo, la capital Hamilton se transformó en una ciudad fantasma, con las personas resguardadas en sus viviendas con las ventanas selladas, mientras las escuelas y los negocios permanecían cerrados desde el jueves.
Los efectos del huracán podían seguirse en vivo en la página web www.portbermudawebcam.com, usualmente una herramienta turística para mostrar las bellas vistas de este conjunto de islas turísticas de 60.000 habitantes en el Atlántico, a unos 1.000 km de la costa estadounidense.
Las autoridades del archipiélago habían advertido que el ciclón podría resultar tan severo como el huracán Fabian, que en 2003 dejó en las Bermudas cuatro muertos y 300 millones en daños.
Gonzalo llegó a alcanzar en días pasados la categoría cuatro con vientos de hasta 230 km/h.
– Provisiones y generadores –
Los habitantes del territorio británico inundaron el jueves las tiendas para comprar provisiones y generadores eléctricos, en previsión de que la tormenta los deje sin corriente.
Muchos botes fueron sacados del agua, mientras que un barco de la armada británica se dirigía a la isla para ayudar con los trabajos de recuperación tras el paso del huracán.
“Estoy satisfecho con los preparativos de las personas. Las Bermudas están preparadas, las personas están lo más seguro que se puede”, dijo el primer ministro de las Bermudas, Michael Dunkley, en un mensaje el viernes.
El aeropuerto internacional cesó sus operaciones desde la noche del jueves hasta por lo menos el sábado.
Gonzalo dejó a su paso por el Caribe un muerto, varios desaparecidos y destrozos.
Esta es la séptima tormenta de la temporada en el Atlántico –que se extiende entre junio y noviembre– y el tercer huracán en tocar el Caribe este año.
El huracán Cristóbal dejó al menos cuatro muertos en agosto, cuando provocó fuertes lluvias e inundaciones en República Dominicana, las Bahamas y Turcas y Caicos.
El NHC ha señalado que esta temporada ha estado menos activa que de costumbre.